«O máis importante que aprendemos é que hai que estudar, isto é máis duro do que parece»
FERROL

Antía, Juan y Vicente, tres cedeireses de 16 años recién graduados en ESO, concluyeron el jueves su primera experiencia laboral. «O máis importante que aprendemos é que hai que estudar [...], isto é máis duro do que parece», remarcan después de ocho semanas de trabajo recolectando arándanos. Sus amigos ya se lo habían advertido -«estades tolos, non ides aguantar»-, pero ellos quisieron participar en la iniciativa impulsada por el ANPA del IES Punta Candieira, en colaboración con la empresa, para proporcionar a un grupo de menores su primer contacto con el mundo laboral. Miguel Ángel Mato acudió al instituto para hablarles de la actividad de su firma y explicarles el procedimiento para optar a un empleo: «Pedíaselles crear unha carta de presentación e un currículo, unha entrevista, a revisión médica e o contrato», explica, contento del rendimiento de los chavales. «Isto vailles aportar moito máis do que é un salario -sostiene-; aquí relacionáronse con xente doutras idades, nacionalidades e formas de ver a vida, que lles aportou moito máis que estar na casa». «Nós estamos encantados e pensamos repetilo o ano que vén, para darlle unha oportunidade á xente nova que queira achegarse ao mundo laboral. De momento, con Horticina, e se cadra que hai algunha outra empresa interesada, igual», apuntan desde el ANPA. Los primeros días, al llegar a casa, a Juan, Vicente y Antía les apetecía dormir y descansar, pero no tardaron en adaptarse. «Aprendemos a convivir, a traballar e que os cartos non veñen das árbores», comentan. Antía ahorrará el dinero ganado este verano; Juan lo destinará al pago de los libros de texto de primero de Bacharelato y Vicente quiere comprarse un kayak, además de haberle ayudado a su madre, que no tuvo que costearle los gastos de las fiestas. «Déronnos catro días para as festas da patroa», cuentan, agradecidos. Rosa está muy satisfecha de la experiencia vivida por su hijo Juan, que le recuerda cuando ella y su hermano ganaron dinero para comprarse una bici, un verano, atando 15.000 anzuelos para su padre (a peseta la unidad).