El Geoparque de la Costa Vasca, un modelo a seguir

A.F.C.

FERROL

Organizan salidas geológicas, visitas guiadas y proponen un recorrido de tres días

25 ago 2016 . Actualizado a las 18:18 h.

En la página web del Geoparque de la Costa Vasca, un referente por su organización y funcionamiento, en opinión de Francisco Canosa, definen esta figura como «un territorio que apuesta por una estrategia de desarrollo sostenible, basado en sus valores naturales y culturales». El Geoparque de la Costa Vasca nació, precisamente, «con el espíritu de llevar a la práctica esas ideas, en los municipios de Zumaia, Deba y Mutriku». Aquí trabajan para «poner en valor el medio natural, especialmente el geológico, pero también la cultura propia del territorio, para que este patrimonio perviva como legado para las nuevas generaciones». La participación constituye otra de sus «señas de identidad», por lo que está abierto a ideas y propuestas.

En este caso, de la gestión se encarga la asociación Geogarapen, con tres centros físicos, uno en cada uno de los municipios. Entre otras actividades, organizan salidas geológicas y visitas guiadas, y proponen un recorrido de tres días por el geoparque, intercalando georutas con la práctica del senderismo, rutas de BTT, paseos a caballo y en barco, kayak, etcétera. Este plan de tres jornadas sirve para promocionar la zona y divulgar «las tradiciones y la cultura local del territorio, rememorando oficios antiguos, costumbres, leyendas, mitos, etcétera». Además de disfrutar de la gastronomía y otros productos típicos, añaden.

En Cáceres se encuentra el Geoparque de Villuercas-Ibores-Jara, un macizo montañoso ubicado en el sureste de la provincia, entre las cuencas de los ríos Tajo y Guadiana, como indican en la página web. La declaración de geoparque y su inclusión en las Redes Europea y Global de Geoparques auspiciadas por la Unesco se remonta a septiembre de 2011. «Desde noviembre de 2015 tiene, además, la consideración de Geoparque Mundial Unesco», remarcan.

Villuercas-Ibores-Jara, Cáceres

La gestión de este geoparque recae en la Diputación de Cáceres, «en estrecha relación» con la Junta de Extremadura (a través de las direcciones generales de Medio Ambiente, Turismo, Desarrollo Rural, Educación y Patrimonio Cultural), la Universidad de Extremadura, la Mancomunidad Integral de Villuercas-Ibores-Jara, el Grupo de Acción Local APRODERVI, la Asociación de Empresas Turísticas del Geoparque y la Asociación Geológica de Extremadura.

Todas estas instituciones están representadas en la comisión territorial, que realiza un seguimiento mensual de las decisiones del consejo del geoparque. El geoturismo (que implica al sector hostelero) es una de las piezas clave del proyecto, junto con un programa educativo desarrollado a través de geocentros o la difusión de los productos característicos de este entorno, como el aceite de oliva o el vino.