El marisqueo de la ría suaviza al fin su crisis y estabiliza mercado

Andrés Vellón Graña
Andrés vellón FERROL / LA VOZ

FERROL

En la imagen, tomada el pasado jueves, mariscadores de la ría trasladando almeja.
En la imagen, tomada el pasado jueves, mariscadores de la ría trasladando almeja. josé pardo< / span>

El gremio repunta en ventas y cosecha cifras similares a las del 2006

24 nov 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

La declaración de la práctica totalidad de la ría de Ferrol como zona C por su elevada carga de contaminación orgánica sumió desde finales del 2006 al marisqueo en una situación de crisis que se ha ido arrastrando desde entonces.

Sin embargo, y a pesar de que todavía no funciona la red de saneamiento y buena parte de esas zonas C siguen en vigor, el gremio ha logrado estabilizar al fin su mercado y sus ventas vuelven a encontrarse al nivel del mencionado ejercicio.

Así, según los datos que maneja la Consellería de Medio Rural e do Mar, entre el 1 de enero y el 23 de noviembre del 2006 las cofradías de Ferrol, Barallobre y Mugardos -esta última menos afectada por la contaminación de la ría- habían despachado algo más de 335.000 kilos de mariscos, fundamentalmente, y pescado por valor de 2,8 millones de euros.

A partir de entonces se produjo una importante caída de la facturación derivada de las dificultades para comercializar la almeja babosa, que necesita ser depurada antes de entrar en el circuito de ventas.

Sin embargo, a pesar de que el sistema de bateas implantado el pasado ejercicio por la Xunta arrancó de una manera irregular, ahora se revela determinante para remontar las cifras de ventas.

Así lo relevan las estadísticas oficiales. Entre el 1 de enero y el 23 de noviembre del 2012 se despacharon 465.000 kilos de productos por valor de casi 2,8 millones de euros. En la misma franja temporal del presente ejercicio han sido 452.000 kilos y 2,7 millones de euros. En otras palabras, como ya se ha mencionado, el mercado se ha estabilizado.

Ahora, falta comprobar cómo se cierra el presente ejercicio. En principio, y después de un mes de parálisis de las bateas por el episodio de toxina que afectó a buena parte del litoral gallego, se prevé que la campaña navideña -cuando más marisco se vende junto con el verano- mejore todavía más los números.

También está en marcha un plan de tareas para la regeneración del banco de as Pías que tiene que dar sus frutos durante el 2014.