Desde sus inicios en 1979 la sociedad de Pedroso acumula tres décadas de teatro, baile y música que la convierten en una de las entidades más antiguas de Narón
05 jul 2009 . Actualizado a las 02:00 h.No se entiende Pedroso sin A Pombiña, y viceversa. La sociedad cultural y recreativa ya es inherente a la parroquia que la vio nacer y sus tres décadas de existencia la atestiguan como una de las entidades más antiguas del municipio. En pleno aniversario, su actual directiva, con Javier Carrasco al frente, organiza un ciclo de actos para festejar la efemérides.
A Pombiña nació en 1979, pero sus orígenes se remontan a diez años atrás. A finales de la década de los sesenta, el cura de la parroquia y un grupo de vecinos crean el teleclub de Pedroso. Nemesio Quintá tomó las riendas de esta experiencia cultural y recreativa pionera en el municipio, cuna de un equipo de fútbol aficionado y grupos de baile y teatro.
El Teleclub crece poco a poco y logra antes de transformarse en A Pombiña levantar un local social, activo a día de hoy. José Miguel Moré Carballeira, presidente de la sociedad de Pedroso en 1982 e integrante de las directivas en 1975 y 2003, recuerda que las obras se encargaron a albañiles de la parroquia. «Se costearon con dinero de la sociedad y ayudas municipales y provinciales», explica. Antes de que el edificio estuviese finalizado, «se acabó el dinero» y el teleclub habilitó entre sus socios «unos bonos de ayuda de 1.000, 2.000 y 5.000 pesetas, que luego se devolvieron», comenta Carrasco. El local, sito frente al consultorio de Pedroso, fue inaugurado en 1974 por el entonces ministro de Cultura, Pío Cabanillas Gallas.
Moré Carballeira distingue tres claras etapas en la historia de A Pombiña. La primera, cuando aún era teleclub, en la que «un grupo de gente tuvo vista para crear una entidad de este tipo y convertir a Pedroso en una parroquia adelantada». Una segunda, cuando A Pombiña tomó el testigo, y la tercera, «la actual, de consolidación».
Aunque el grupo de baile de A Pombiña se disolvió, sigue en activo el de teatro y desde los años noventa cuentan con una coral. «De la misma forma que cuando piensas en rondalla, hablas de Maniños, Franza o Neda, si dices teatro, piensas en Pedroso», señala el antiguo presidente de A Pombiña.
Actualmente, integran el grupo de teatro entre diez y quince personas. Javier Carrasco explica que realizan dos obras al año, bajo la dirección de Gonzalo Grandal, que fue también presidente de A Pombiña.
No es fácil mantener una sociedad de este tipo durante tres décadas. Ha habido «momentos de bajón», confirman Moré y Carrasco, «pero siempre ha habido alguien que ha venido a reflotarla, incluso los jóvenes».
A Pombiña cuenta hoy en día con 450 socios, treinta años de historia y una carrera cultural que la acredita como un referente asociativo en la comarca. De ello son responsables Vicente Díaz Montañés, Juan Regueira, José Moré Carballeira, Ramiro Pouso Picos, Manuel Caaveiro Pena, Gonzalo Grandal, Arturo Pereira, Roberto Carlos Bouza, Fernando Romero, Enrique Rey y Javier Carrasco (así como todas las personas que los acompañaron en las directivas).