Viajamos a Italia para vivir la pasión por Ferrari y todo lo que rodea a la marca del «cavallino». Tras conocer su fábrica, colarse en el departamento de carreras y conducir el SF90 Stradale, uno se convierte en un auténtico «tifosi».
19 oct 2021 . Actualizado a las 16:40 h.El pequeño pueblo de Maranello, una localidad de apenas 17.000 habitantes enclavado en la región de Emilia-Romaña, al norte de Italia, es el corazón de Ferrari, la marca que fabrica los coches superdeportivos más famosos y deseados del mundo.
Viajar hasta allí es hacerlo a la cuna del automovilismo deportivo más pasional. Nada más pisar las calles de Maranello sientes cómo la pasión por Ferrari se respira en todo lo que rodea a esa factoría, que ha sabido conjugar la tradición y la innovación. En ella trabajan 4.556 empleados que, en el 2019, el año de mayor producción, fabricaron un total de 10.131 coches, siempre uno menos de los que el mercado demanda, como mandaba su creador, Enzo Ferrari.
NACIDOS PARA CORRER
Los orígenes de Ferrari están en el mundo de la competición. En 1929 Enzo Ferrari fundó la Scudería Ferrari como departamento de competición de Alfa Romeo. Tras cosechar innumerables éxitos en carreras por todo el mundo, se independizó y fue entonces cuando tuvo que comenzar a producir coches de calle para poder financiar su actividad en la competición.
Los Ferrari se convirtieron rápidamente en coches de ensueño para clientes de todo el mundo, que deseaban tener en su garaje un bólido de color rojo como los que veían ganar cada fin de semana en las carreras de Fórmula 1. Hoy en día, Ferrari continúa teniendo en la competición una parte clave de su actividad, con la Scudería Ferrari compitiendo en Fórmula 1 con los pilotos Charles Leclerc y Carlos Sainz defendiendo sus colores y luciendo, todo sea dicho, los colores de Estrella Galicia en la carrocería de sus monoplazas.
Visitar Maranello es muy recomendable. Allí podrás disfrutar del impresionante Museo Ferrari, haciendo un recorrido de lo más entretenido por la historia de la marca, al tiempo que deleitas la vista con algunos de sus coches más memorables, como el Ferrari 288 GTO. Si la visita tiene como punto y final una comida en el delicioso restaurante Cavallino, situado justo enfrente de la fábrica y decorado con piezas de los coches, el plan será redondo.
LA COLECCIÓN MÁS HERMOSA DEL MUNDO
Ferrari comenzó construyendo coches de carreras antes de fabricar los superdeportivos más deseados del mundo. Muchos de sus coches victoriosos en la Fórmula 1 siguen funcionando en manos particulares gracias al programa Corse Clienti, donde Marc Gené enseña a los mejores clientes de Ferrari a pilotar esos bólidos.
Pilotando el Ferrari SF90 Stradale de 1.000 caballos
El Ferrari SF90 Stradale es el coche más avanzado tecnológicamente jamás fabricado por Ferrari. Este superdeportivo híbrido enchufable combina tres motores eléctricos y un motor de gasolina V8 biturbo para producir 1.000 CV. Conducir un coche tan potente en un trazado como el circuito de Fiorano, la pista de pruebas de Ferrari, puede intimidar, pero cuando lo haces con un guía como Marc Gené marcando camino en otro SF90 Stradale, todo parece más sencillo. El SF90 es una bestia salvaje, capaz de llevarte de 0 a 100 km/h desde parado en solo 2,5 segundos, o alcanzar 340 km/h de velocidad máxima. Frente a lo que cabía esperar, es increíblemente fácil de pilotar gracias a la electrónica avanzada y a la tracción a las cuatro ruedas, ya que dos motores eléctricos mueven el eje delantero. Su precio es de 489.725 euros. Un sueño.