A partir del próximo año, todos los coches que se vendan en la Unión Europea deberán ir equipados con ocho sistemas de ayuda al conductor que mejorarán la seguridad tanto de usuarios como de peatones o ciclistas. Se evitarán así 25.000 muertes y 140.000 heridos graves en los próximos 18 años
21 sep 2021 . Actualizado a las 10:08 h.Los nuevos sistemas obligatorios ya funcionan ahora mismo en muchos modelos que están en el mercado, pero su obligatoriedad democratizará la seguridad de todos los usuarios. Un problema más acuciante, todavía, en España, que cuenta con uno de los parques móviles más viejos y por tanto menos seguro de la Unión Europea.
Los ocho sistemas obligatorios serán los siguientes:
-Asistente de Velocidad Inteligente (ISA en inglés).
- Cámara trasera con detección de tráfico cruzado.
- Detectores de fatiga y somnolencia
-Frenada de emergencia.
-Alerta de cambio involuntario de carril
- Bloqueo del vehículo con alcoholímetro.
- Caja negra.
- Alerta de cinturón en plazas traseras.
Quizás de entre todos ellos, el más destacable sea la caja negra, porque los demás ya los conocemos por estar generalizados en vehículos de gama alta.
La caja negra controlará todos los parámetros del coche, desde consumos, tanto en eléctricos como de combustión, si se ha modificado o manipulado cualquier ajuste del vehículo, así como los datos en caso de accidente.
El resto de los sistemas obligatorios a partir del 2022 facilitarán mucho la conducción y la seguridad. Por ejemplo, la frenada de emergencia, que obligará a montar radares y cámaras en todos los coches, permitiendo que el propio vehículo actúe frente a los despistes del conductor, realizando las frenadas por sí solo.
También la cámara trasera, que detecta el tráfico cruzado, ayudará en las salidas de los aparcamientos en batería avisándonos si se acerca algún vehículo, e incluso inmovilizando el nuestro si no lo hacemos ante el aviso.
Otra herramienta útil será el Asistente de Velocidad Inteligente, que leerá las señales de velocidad máxima y adaptará la del vehículo a ellas. También servirá este sistema para controlar la velocidad de crucero de forma automática cuando los coches de delante frenen o nos acerquemos demasiado a ellos.
Son sistemas muy empleados ya en vehículos de gama alta, pero que se permitirá ahora disfrutarlos a todos los compradores de nuevos coches a partir del 2022. Estas medidas obligatorias, sin embargo, incidirán también en el precio de los coches que deberán incorporar más tecnología, además de necesitar más microchips, tan escasos.