La prensa extranjera coincide en que, aunque sin valor jurídico, Cataluña puede usar la consulta para reclamar más autonomía
10 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.Que la consulta catalana no iba a ser la versión patria del referendo escocés lo dejó claro el Tribunal Constitucional en sendas resoluciones. Y ayer lo constató la prensa internacional que, con la frialdad que solo otorga la distancia, coincidía de forma casi unánime en adjuntarle el calificativo de «simbólico» a un «proceso participativo» que, según el análisis generalizado, tenía más de manifestación cívica que de cita con las urnas.
«Un voto para nada», afirmaba contundente esta semana el rotativo francés Le Monde en un duro editorial en el que advertía de que una votación sin valor jurídico ni garantías legales tenía el «riesgo de empañar la idea misma del derecho a decidir a ojos del resto de los españoles y de Europa». Aunque ayer matizaba y reconocía que una fuerte participación puede obligar al Gobierno central a ampliar la autonomía de la que actualmente goza Cataluña, especialmente en materia fiscal.
De «ejercicio teatral» calificaba el referendo fallido The New York Times, que sin embargo advertía de que «la campaña [a favor de la independencia] irá a más hasta que se le dé a la gente el derecho a decidir si permanecer o no en España». El rotativo liga el desafío soberanista con el descrédito de la clase política española, carcomida por la corrupción e incapaz de lidiar con este problema, escenario que no creen que mejore tras las próximas generales, en las que la irrupción de Podemos podría impedir que se conforme una mayoría estable. En ese contexto, el diario entiende que «una gran coalición [PP-PSOE] podría ser la mejor vía para resolver la situación catalana», al tiempo que advertía de que cualquier intento de declarar de forma unilateral la independencia por parte del Gobierno regional podría acabar en la bancarrota de la comunidad si el Ejecutivo central deja de financiarlo.
Conforme avanzaba el día, y aunque relegada por otros acontecimientos como el 25 aniversario de la caída del Muro de Berlín e incluso el accidente de bus de Murcia, los medios internacionales -en los que destacaban la masiva participación y la ausencia de incidentes en una consulta en la que los miembros de la mesa aplaudían a los primeros votantes. «Mucho fervor en esta Europa que es más sosa que chupar un clavo», remarcaba el corresponsal del diario argentino Clarín.