Del poder y del «#pucherazo»

ESPAÑA

22 ago 2014 . Actualizado a las 11:53 h.

Las hemerotecas digitales sonrojan a cualquiera. Y más los vídeos de Youtube. Puede verse aquí, en su discurso de investidura Rajoy defendió el sistema electoral que ahora pretende reformar de forma unilateral para que el PP conserve o aumente su cuota de poder en las municipales del 2015. Los populares recelan de un escenario político similar al que imperó muchos años en Galicia: por lo general al PP solo le valía la mayoría absoluta frente a la alianza más o menos permanente y estable de PSOE y BNG. Tras el terremoto de las europeas, temen encontrarse en una situación similar en casi toda España. Y a Podemos.

Los sondeos acreditan que los de Pablo Iglesias pueden pescar votos en el caladero de los antiguos votantes populares desafectos. Y se están armando plataformas ciudadanas capaces de atraer electores y, tal vez, de quitar y poner regidores con el sistema proporcional actual.

Una vez más, Twitter es la arena en la que se libra una intensa guerra de propaganda a favor y en contra de primar a la fuerza más votada. Eslóganes y etiquetas (#pucherazoelectoral) esconden el efecto real (¿y perverso?) de la reforma: conseguir más bastones de mando con menos votos. El votante importa poco. O nada. Toca recordar la famosa frase de Clinton sobre la economía. Y enmendarla para entender la reforma electoral propuesta: «Es el poder, estúpido».