Los socialistas celebrarán un congreso federal extraordinario para elegir nuevo líder el 19 y 20 de julio
26 may 2014 . Actualizado a las 21:50 h.Los malos resultados cosechados por el PSOE en las elecciones europeas ha obligado a Alfredo Pérez Rubalcaba a renunciar como secretario general del partido socialista y a adelantar el congreso extraordinario de noviembre a los próximos 19 y 20 de julio.
Rubalcaba ha comenzado su rueda de prensa de valoración de las elecciones afirmando que los resultados en las elecciones europeas habían sido «malos sin paliativos» y confirma que es la responsabildad de la secretaría general. El líder de los socialistas ha reiterado que el proyecto del PSOE era recuperar la confianza de los votantes y que para ello es necesario un congreso extraordinario y un cambio en la dirección del partido y para el que ha asegurado que «no me presentaré como candidato en el congreso extraordinario», algo que ya conocía Elena Valenciano y que en esta decisión no han influido los resultados de las elecciones europeas recalcando que «hace tiempo que lo decidí». «Esta dirección no debe ser quien organice las primarias abiertas», cuyo calendario estará ya en manos de la nueva Ejecutiva, aseguró.
Hasta que se celebre el congreso extraordinario, Pérez Rubalcaba seguirá ejerciendo como secretario general del PSOE y líder de la oposición en el Congreso «hasta que el partido decida quien me sustituya», tras ese proceso, el líder de los socialistas no ha querido desvelar que será de su futuro.
En cuanto a que se elija primer una nueva dirección del partido y posteriormente se convoquen unas primarias para elegir al candidato a la presidencia, Rubalcaba ha reiterado que es «una nueva direción es la que tiene que organizar las primarias».
Rubalcaba no ha querido desvelar si se retirará de la política cuando sea relevado en el Congreso Extraordinario de julio y ha defendido que, aunque él se vaya, el proyecto político que ha capitaneado durante dos años «debe ser continuado». «Tenemos un proyecto a medias que espero que la nueva dirección del partido continúe al completo», ha dicho Rubalcaba, convencido sobre todo de la utilidad y vigencia de ese proyecto en lo que se refiere al «problema serio» de Cataluña.
Marcado por las generales del 2011
Las últimas elecciones generales, en noviembre del 2011, en las que Mariano Rajoy fue proclamado presidente del Gobierno, quedarán marcadas para Rubalcaba, ya que obtuvo el peor resultado electoral a nivel nacional para el PSOE desde la restauración de la democracia. Tras la derrota, Pérez Rubalcaba presentó su candidatura a la secretaría general del PSOE y en febrero del 2012 se convirtió en secretario general tras vencer en primarias a Carme Chacón por 22 votos. Fueron muchos los que dentro del propio seno del partido los que pedían un cambio tras la debacle electoral en las generales, algo a lo que Rubalcaba se negaba a pesar de las duras políticas económicas que aplicó el Gobierno de Rajoy y la oportunidad que se abría para los socialistas en la oposición.
Rubalcaba tenía escrito su calendario y así fijo en noviembre las primarias abiertas socialistas para elegir al próximo candidato a la presidencia, y no sé cansó de insistir en que dicho calendario se respetaría. Sin embargo, el líder de los socialistas era consciente de que los resultados de las elecciones europeas marcarían su futuro en el partido. «El 25 por la noche reflexionaré y diré lo que hay que hacer, lo que creo que hay que hacer en mi partido y ya está», indicó. Lo único claro para Rubalcaba es que si decidiera el paso de irme en este momento de la política «es una pregunta fantástica para el día 25» reconoció.
Entre las quinielas socialistas siempre ha sonado la exministra Carme Chacón, el exlehendakari Patxi López, el secretario general del Grupo Socialistas Eduardo Madina y el diputado Pedro Sánchez.