El PSOE acusa al PP, y UPyD a los dos, de no incentivar la participación
10 may 2014 . Actualizado a las 07:00 h.E l primer día de campaña dejó un debate sobre la mesa. ¿Le interesa al PP una campaña de perfil bajo que tenga como único objetivo movilizar a sus fieles? ¿Al PSOE también? La portavoz de UPyD, Rosa Díez, no tiene dudas de que es así y por eso acusó ayer a los dos grandes partidos de desincentivar la participación para evitar el castigo a sus políticas. «PP y PSOE lo que quieren es que la gente no vaya a votar y hacen una campaña para sus hooligan y eso es antidemocrático», afirmó.
La cabeza de lista socialista, Elena Valenciano lanzó la pelota al tejado del Gobierno, al que acusó de haber «dimitido» de su responsabilidad institucional y política, al no hacer campaña para explicar a la población lo que está en juego en las elecciones. El dato del CIS es demoledor: solo el 16,9 % de los ciudadano saben que las elecciones se celebran el 25 de mayo. Pero la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, pidió a los españoles que participen en las elecciones y a los partidos que hagan pedagogía sobre la trascendencia de las decisiones de las instituciones europeas en la vida diaria.
Los partidos tienen sus estrategias perfiladas, como se vio ayer. El PP busca desesperadamente movilizar a los suyos y recuperar a los decepcionados con el Gobierno. El PSOE quiere dejar claras las diferencias que les separan de los populares. Mientras IU y UPyD reclaman un voto de castigo al bipartidismo.
Arias Cañete eligió para su debut un encuentro con jóvenes para pedir una «movilización absoluta», con la mirada puesta en su electorado, consciente del desinterés que existe ante estas europeas. Fue tan expresivo que recordó que la noche previa a la votación se juega la final de la Champions y los jóvenes se acostarán tarde. Por eso alentó a los fieles a utilizar el móvil como «un arma absoluta para ganar las elecciones». «Mucho móvil, mucho móvil, mucho móvil, empezáis a llamar a gente sin parar, a vuestros amigos y al que esté en la cama lo sacáis y lo lleváis a las urnas», aseguró.
Los socialistas lanzaron la campaña «nosomoslomismo», con el objetivo de demostrar, según argumentan, las grandes diferencias políticas e ideológicas. De esta forma pretenden disipar las dudas de sus potenciales votantes. Según el CIS, el 17,4 % de los que otorgaron su confianza al PSOE en el 2009 dudan entre volver a hacerlo o cambiar al PP y otro 17,1 % si inclinarse por IU.
Cayo Lara (IU) incidió en la estrategia de su formación: golpear al bipartidismo, que señaló no está agotado y aún suma demasiados votos, pero sufrirá un «descalabro importante».