Un equipo a la medida de Lesmes, que llega dispuesto a ejercer plenamente sus dos cargos

J. Á. F. REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

21 dic 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Carlos Lesmes, en el pleno de ayer, dio a conocer de forma oficial la distribución de los veinte vocales en las distintas comisiones en las que se estructura el órgano de gobierno del poder judicial. Un equipo completamente configurado a la medida de un presidente que llega dispuesto a ejercer con plena dedicación y autoridad este cargo y el de máximo responsable del Tribunal Supremo, con lo que la restará buena parte del protagonismo ejecutivo al nuevo vicepresidente.

El motor de esta nueva estructura será la comisión permanente, presidida por el presidente del CGPJ e integrada por los vocales Mercé Pigem i Palmés, Álvaro Cuesta Martínez, Gerardo Martínez-Tristán, Juan Manuel Fernández Martínez y María del Mar Cabrejas Guijarro. Estos cinco vocales serán los únicos con dedicación exclusiva. Teóricamente la composición de esta comisión será rotatoria, pero todo apunta a que los primeros se mantendrán durante los cinco años de mandato del actual consejo.

La principal novedad de su composición es la entrada en la comisión de Martínez-Tristán, el magistrado que recusó el PSOE de Madrid en la polémica sobre la privatización sanitaria. Con su nombramiento, tendrá que abandonar la presidencia de la sala de lo Contencioso del Tribunal Superior de Madrid. Se quedó fuera Grande-Marlaska, que era la alternativa y que así podrá seguir al frente de la sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, un órgano que ha contribuido a pacificar desde que sustituyó a Gómez Bermúdez.

Se confirmó finalmente la presencia en la Permanente de Juan Manuel Fernández, un magistrado de gran prestigio dentro del sector conservador de la carrera judicial. También la de los exdiputados Mercé Pigem i Palmés -CiU- y Álvaro Cuesta Martínez -PSOE-, quién esta llamado a ejercer el liderazgo del sector progresista. El quinto puesto, que inicialmente parecía reservado a Clara Martínez, del Tribunal Supremo, al final fue para Mar Cabrejas, titular del Juzgado 55 de Madrid, elegida a propuesta de los socialistas.