El ex ministro de Justicia echó en cara al ex titular de Interior que dijera que el aborto es peor que la pederastia
02 jun 2009 . Actualizado a las 14:09 h.Jaime Mayor Oreja salió desde el principio al ataque y no bajo el diapasón de sus críticas a lo largo de todo el debate que le enfrentó anoche a Juan Fernando López Aguilar. El popular le acusó de mentir en varias ocasiones, incluso rescató los GAL, el caso Roldán y los fondos reservados, denunció la «aberración» de no considerar ser humano al feto e insistió en el «fracaso económico» del Gobierno, con cuatro millones de parados. Pero no sacó ni el Falcon ni la subvención de Chaves.
Por su parte, el cabeza de lista socialista le calificó de nostálgico del franquismo, denunció la «doble moral» y la «falta de dignidad» del PP al ensuciar la campaña introduciendo el asunto de los aviones y le echó en cara que dijera que el aborto es peor que la pederastia. Mayor Oreja tuvo que aclarar que los abusos a menores es lo que más repugnancia le produce como padre de familia y «una persona decente y normal».
En su primera intervención, que marcó su tono agresivo de la noche, Mayor Oreja recriminó a su interlocutor el «tono y la actitud» de su partido en la campaña y le dijo que «la demagogia, las acusaciones, las descalificaciones personales no aportan nunca soluciones». «Sus mentiras solo tienen una doble intención, dividir a los españoles y desfigurar a los adversarios y en política no vale todo», señaló.
Pero no paró ahí, para abrir el turno de la crisis económica dijo que nunca en sus 32 años de vida política había visto una carta «tan llena de mentiras y falsedades» como la enviada por Zapatero y López Aguilar a los electores, en la que se dice que el PP quiere implantar la jornada de 65 horas, facilitar los despidos, bajar las pensiones y los salarios o desproteger a los desempleados. «Mentira tras mentira», concluyó.
López Aguilar rechazó las «recetas del pasado, tan antiguas como inútiles» de su adversario para salir de la crisis, defendió el cambio de modelo de crecimiento y acusó al PP de situarse fuera del consenso internacional para enfrentarse a la recesión con tal de «llevarle la contraria al Gobierno». Llegó a hablar de «balance brillante» del Ejecutivo, a lo que Mayor replicó que se lo dijera a una familia media española y volvió a la carga con la carta, cuyo contenido tildó de «mentira total».
«Crímenes de Estado»
«Los españoles me conocen, fui ministro de Interior y en esa etapa nadie robó en el ministerio y nadie fue procesado por crímenes de Estado», sostuvo Mayor Oreja. Este dijo que al PP le corresponde «defender las libertades de Europa en España», una vez que los socialistas han llevado la confrontación y la división al ámbito de los valores. El ex titular de Justicia respondió que la idea que subyace bajo el discurso de su rival es que «cualquier tiempo pasado fue mejor» y le tildó de nostálgico de una época en la que «había una sola idea de España, una sola manera de ser español, una sola lengua» y no se vivía con «extraordinaria placidez».
El ex ministro del Interior dijo que tiene «una confianza total en la sociedad española y una preocupación por las políticas y la manera de gobernar España de Zapatero. «Me criminalizó ETA y también el PNV, ahora no lo haga usted», mantuvo Mayor Oreja.