ZP convence a López Aguilar

Manuel Campo Vidal

ESPAÑA

19 ago 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

Con un ojo en el País Vasco, donde ETA y su entorno protestan porque no les dejan mandar en el proceso de paz, los partidos aprovechan el verano para buscar pesos pesados para encabezar listas autonómicas o municipales en las que tanto se juegan. Ex ministros como Javier Solana , Abel Caballero , Javier Arenas y Carmen Alborch , o ministros como López Aguilar y acaso Jordi Sevilla , pueden ser movilizados. Si se dejan. En una gran batalla, PSOE y PP medirán sus fuerzas en mayo, a un año de las generales y andaluzas. En los resultados se leerá el acierto o el fracaso de la crispación que vivimos en la política, que no en la sociedad. Antes habrá elecciones catalanas, pero esas son de otra liga y no valen para comparar, porque el PP allí es fuerza muy secundaria aunque cuente con uno de sus mejores líderes nacionales, Josep Piqué . Piqué es un valor desaprovechado, como Roca Junyent y Josep Borrell , en el que su origen pesa en negativo. Pero es que, además de catalán, es centrista y encima negociador. En la dirección actual del PP tantos defectos no se toleran bien. Por la importancia de esas elecciones, Zapatero se ha trabajado Canarias estas vacaciones, sólo interrumpidas para viajar dos días a Galicia debido a los incendios. Se trataba de impulsar en el archipiélago la corriente ascendente de voto PSOE que ahora mismo disfruta en Cataluña, y, a la vez, de convencer a Juan Fernando López Aguilar para encabezar el cartel. Lo segundo ya está confirmado. Según ha sabido La Voz, López Aguilar se rindió definitivamente hace diez días y sólo arrancó el compromiso de seguir como ministro hasta fin de año. Se la juega, sin duda, el joven ministro de Justicia, que de mayor quería serlo de Exteriores, porque no es seguro del todo que gobierne aunque gane. Probable sí, seguro no. En cualquier caso, el Gobierno de Canarias, a la vista de los cayucos que llegan a diario desde Africa, es casi un pequeño ministerio de Exteriores, porque la clave es negociar con Marruecos, Mauritania, Senegal, Mali y Costa de Marfil, y a la vez con Bruselas, para prevenir oleadas de inmigrantes y para repatriarlos sin ruido. El objetivo mínimo de populares y socialistas es conservar lo que tienen, que no es poco, y ganar algunas plazas simbólicas. El PP sueña con conquistar Asturias, Castilla-La Mancha y Sevilla, donde el alcalde socialista pasa apuros, con lo que tendrían ya todas las capitales andaluzas excepto Córdoba, que siempre fue de Izquierda Unida. Rosa Aguilar se debate entre seguir como alcaldesa o ser candidata en Madrid por delante de Llamazares . O las dos cosas. El PSOE quiere preservar sobre todo Barcelona, Sevilla y Zaragoza, la plaza más peleada por la Expo del Agua del 2008. Reviviremos «los sitios de Zaragoza» porque allí concurren el alcalde socialista Belloch , ex ministro de Interior y Justicia, un ex alcalde del PP, Atarés , buen gestor, y una sorpresa: es tal la importancia de la batalla, que desembarca el presidente del Partido Aragonés, José Ángel Biel , actual vicepresidente del gobierno autonómico. La Voz ha podido saber que es decisión firme aunque no se hará pública hasta noviembre. Algo así consideró pero desestimó Javier Arenas. «El PP ha perdido una oportunidad en Sevilla no presentando a Arenas porque nuestro alcalde está débil y desde allí se hubiera reforzado para las autonómicas», comenta un colaborador de Chaves . Ha optado por reservarse para, seguramente, perder de nuevo frente a Chaves. Un gran empresario sevillano confió a La Voz que hubo alguna conversación para fichar a Arenas en un futuro no muy lejano. Son pesos pesados que están de salida. Se verá. Pero además de preservar lo que tiene y ganar Canarias, el PSOE quiere apostar fuerte en Madrid, Valencia y Vigo. Y, complementariamente, en Granada, León y Burgos, donde precisamente un peso pesado, Aparicio , ex ministro de Aznar , les levantó la alcaldía. Cuando se le dice a Blanco que es un espejismo querer ganar a Esperanza Aguirre con un candidato como Rafael Simancas , responde: «Paradójicamente ahora tenemos mejor la alcaldía que la Comunidad». Por eso Zapatero tienta a Javier Solana, quien se resiste porque ir contra Ruiz Gallardón es un riesgo muy alto y porque «no tengo nada que ganar». Hace cuatro años hubiera aceptado, pero entonces a ZP y a Blanco, todavía en la oposición, les podía dar miedo un alcalde de Madrid socialista con vocación de presidente del Gobierno. En Valencia han convencido a la ex ministra Carmen Alborch para disputar la alcaldía a Rita Barberá , misión casi imposible. Y para Vigo, primera ciudad de Galicia, pretenden al ex ministro y catedrático Abel Caballero. «Con Abel ganaríamos y para Touriño sería un gran apoyo», admite Blanco. El problema es que Caballero quiere culminar desde el Puerto la brillante y ambiciosa propuesta de abrir Vigo al mar. «Es el proyecto que Vigo necesita desde hace veinte años y nadie se había atrevido a hacerlo», comenta Juan Miguel Diz Guedes , ex conselleiro de Fraga y actualmente abogado en la ciudad. El proyecto de Caballero ha conmocionado a toda una ciudad de gran potencial económico pero necesitada de grandes proyectos y de un líder municipal porque ya es la capital española más inestable, con siete alcaldes en seis elecciones. Por no hablar de la inestabilidad interna de sus partidos. Esas son las grandes apuestas aún por cerrar.