Habitaciones contra el pánico

La Voz G. B. | BARCELONA

ESPAÑA

Reportaje | Oleada de robos a viviendas El incremento de los asaltos a chalés ha disparado la demanda de estancias acorazadas en las que los inquilinos pueden protegerse de los nuevos delincuentes, cada vez más agresivos

21 may 2006 . Actualizado a las 07:00 h.

El blindaje de un aposento del domicilio para evitar el acceso de los ladrones no es un fenómeno nuevo, pues ya hace años que los propietarios de chalés, sobre todo aquellos situados en lujosas zonas residenciales, vienen instalando puertas blindadas en sus sótanos y bodegas, tanto para guardar bienes de valor como para guarecerse en caso de detectar la presencia de atracadores. Sin embargo, el incremento de asaltos cometidos en viviendas mientras sus propietarios duermen ha comportado que estos opten por bunkerizar los dormitorios principales, con el objetivo de poder permanecer en una estancia blindada tan pronto como se tiene sospecha de que hay un intruso en casa, sin necesidad de desplazarse por la misma. El presidente de la Asociación Catalana de Empresas de Seguridad (ACES), Fernando Fernández, aseguró que este tipo de sistemas de seguridad ha experimentado en el último año «un aumento importante», muy superior proporcionalmente al del resto de las medidas de seguridad, como la instalación de alarmas o de cámaras de vigilancia para controlar los movimientos en el exterior de la vivienda. «Murcigleros» Este tipo de estancias seguras se habilitan principalmente en casas de nueva construcción, pero también en aquellos domicilios que ya han sufrido robos o cuyos propietarios han sido víctimas de la violencia de los asaltantes, también conocidos como murcigleros , ya que acostumbran a actuar de noche y vestidos de negro. «Hace más de un año que ocurren estos asaltos, pero hasta ahora no han salido a la luz. Nuestros clientes nos piden cada vez más habitaciones del pánico, sobre todo los que han sido secuestrados o han sufrido palizas, y que son muchos más casos de los que aparecen en los medios», explicó una responsable de la empresa Arcas Soler, una de las principales compañías españolas especializadas en sistemas de seguridad. Estos cuartos seguros, que se hicieron populares con la película La habitación del pánico (2002), dirigida por David Fincher y protagonizada por Jodie Foster, constan básicamente de una puerta acorazada y de una doble pared, aunque pueden disponer también, y es recomendable que así sea, de una cámara de videovigilancia y una alarma conectada a una empresa de seguridad. Arcas Soler ha habilitado en los últimos años cerca de un centenar de habitaciones del pánico, y la oleada de robos y asaltos violentos a casas que está viviendo Cataluña en los últimos meses hace prever un incremento de la demanda de estos cuartos de seguridad.