Sólo los aplausos rompieron el silencio en la capilla ardiente de José María Korta
ESPAÑA
Numerosas autoridades, junto al «lehendakari» y el ministro del Interior, velaron al cadáver, que será enterrado esta tarde en Zumaia Silencio, resignación, dolor y mucha impotencia. Ese era el ambiente que se soportaba a las diez y cuarto de la noche de ayer, mientras llegaba el cadáver del empresario José María Korta a la capilla ardiente, instalada en el salón de plenos del ayuntamiento de Zumaia. Numerosas autoridades recibieron al cadáver del presidente de la patronal guipuzcoana, con el «lehendakari», Juan José Ibarretxe, en primera fila. Esta mañana, a partir de las nueve, el público podrá dar el último adiós a la víctima, y asistir al funeral. Tanto el vicepresidente Rajoy como el ministro Mayor Oreja tienen previsto asistir al sepelio.
09 ago 2000 . Actualizado a las 07:00 h.Las autoridades y algunos vecinos de Zumaia que esperaban en la capilla ardiente prorrumpieron en aplausos al llegar el cadáver, mientras cinco amigos del fallecido introducían el féretro en el consistorio. Allí estaban también los hijos y los familiares más cercanos de Korta, quienes expresaron su deseo velar durante toda la noche el cuerpo en la más estricta intimidad. Al consistorio llegó sobre las 21,50 horas el lehendakari, Juan José Ibarretxe, quien interrumpió sus vacaciones y se desplazó ayer a Zumaia desde Bruselas, donde ya hizo por la tarde una declaración institucional de repulsa tras conocer el atentado. Cerca de las once de la noche, acudió también el ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja. La capilla ardiente se abrirá a las 9 horas de hoy al público, que podrá visitarla hasta que el cuerpo sea trasladado a la parroquia San Pedro Apóstol, de Zumaia, donde se oficiará el funeral de cuerpo presente, tras lo cual será enterrado en el cementerio de esta localidad. Al sepelio acudirá el vicepresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que ayer se desplazó a Madrid a causa del atentado.