Abel Caballero no da por perdida la batalla por seguir como presidente de la FEMP

Ángel Paniagua Pérez
ÁNGEL PANIAGUA VIGO / LA VOZ

ELECCIONES 28M

Oscar Vázquez

La elección no depende de los votos sino de las alcaldías

01 jun 2023 . Actualizado a las 15:27 h.

Abel Caballero todavía se postula para continuar como presidente de la Federación Española de Municipios y Provincias. No ha presentado su candidatura formal, pues tal cosa no existe, pero ha lanzado ya varios mensajes en ese sentido. El alcalde de Vigo lleva ocho años en el cargo y nunca ha expresado su voluntad de dejarlo. Y después de que el PP ganase las elecciones municipales del domingo, lanzó un aviso: «Alguna gente habla de la pérdida de la FEMP [por parte de Caballero]. ¿En qué se basan?». Nadie le había preguntado por esa «pérdida».

Ser el presidente de los alcaldes españoles ha aportado cierta relevancia simbólica en el plano nacional. Participa en actos institucionales, se reúne con el rey o acude a encuentros de presidentes. Ostentar ese cargo ha permitido a Caballero reunirse con ministros con cierta asiduidad para tratar asuntos que afectan a todos los ayuntamientos y de paso lanzar algún anuncio en clave local. También le ha permitido convertirse en un referente del municipalismo del PSOE, porque sus estatutos reservan una silla en su comité federal al principal representante del partido en la Federación Española de Municipios y Provincias.

Caballero había convertido este cargo en uno de sus principales activos políticos. «Vigo preside la FEMP», solía recordar. También el hecho de que su número dos, Carmela Silva, presidiese la Diputación, que ahora ha perdido, o que David Regades dirija la Zona Franca —nombrado por el Gobierno de Sánchez—. Por eso la oposición ha empezado a apretarle con el futuro de estos tres organismos. «Se acabaron los paseos por Madrid para hacerse fotos», dijo ayer la candidata del PP en Vigo, Marta Fernández-Tapias, en referencia a la FEMP.

Pero Caballero todavía no da por perdida la presidencia. No hay ninguna norma que indique que el PSOE no la pueda conservar. El PP sacó 750.000 votos más que el PSOE, pero ese cargo no depende del número de votos. La FEMP es una asociación de ayuntamientos y diputaciones. Sus estatutos dicen que la representación de estas entidades las ejerce el alcalde o presidente. Por lo tanto, lo relevante es el número de alcaldías. A cada municipio se le asignan un número de votos según su población. Las ciudades de entre 100.000 y 500.000 habitantes tienen 50 votos. Las que sobrepasan el millón, tienen 100.

Así que hasta que el día 17 se constituyan las corporaciones locales, no se sabrá con certeza qué fuerzas tiene cada partido político. «Aún no sabemos cuántos alcaldes de cada color político hay en España, es prematuro», dijo Caballero para zanjar el debate. E insistió en postularse, hablando de sus resultados como los mejores de una gran ciudad en España en un contexto de retroceso para los socialistas. El propio Abel Caballero accedió a la presidencia de la FEMP en el 2015 a pesar de que el PSOE había tenido 450.000 votos menos que el PP en las elecciones locales.

De momento, solo otra persona ha presidido la FEMP dos mandatos: el coruñés Francisco Vázquez. Estuvo en dos tandas: de 1991 a 1995 y de 2003 a 2006, cuando la dejó porque Zapatero lo envió de embajador al Vaticano. Caballero siempre ha tenido a Vázquez como uno de sus referentes. Ya lo ha superado en años; ahora quiere un tercer mandato.