Rueda avisa al Gobierno que tomará medidas si se perdona deuda a comunidades de forma «unilateral»

Manuel Varela Fariña
M.Varela REDACCIÓN / LA VOZ

ELECCIONES 23J

Alejandro Martínez Vélez | EUROPAPRESS

La condonación divide al PP, con varias comunidades que se verían beneficiadas por la quita en su deuda con el FLA, y enfada al socialista Page

02 ago 2023 . Actualizado a las 21:32 h.

El melón sobre la financiación autonómica se ha abierto en la antesala de las negociaciones del PSOE con Junts y ERC para investir a Pedro Sánchez. ¿Y si una quita de la deuda amortiza las exigencias de amnistía y referendo que reclaman los independentistas? La estrategia del Gobierno en funciones pasa por despejar el ruido soberanista de la mesa de diálogo y colocar en medio el sistema de financiación, caducado desde hace nueve años.

La ministra de Hacienda en funciones, María Jesús Montero, espera que los apoyos para la investidura sirvan como «impulso» para retomar el debate, y descartó por ahora condonar parte de la deuda a Cataluña y otras comunidades. Pero una enmienda del PSC en el Parlamento catalán va en esa línea, sembrando discrepancias entre distintos líderes territoriales. El Gobierno gallego expresó su «preocupación», tanto el martes a través del conselleiro de Facenda, Miguel Corgos, como este miércoles el propio presidente Alfonso Rueda.

El titular de la Xunta criticó que pueda haber una condonación de deuda «unilateral» a algunas comunidades —«sen compensar a Galicia, como mínimo, na mesma porcentaxe»— con «o único interese egoísta» por parte del PSOE de «lograr un pacto de investidura». «Non sería aceptable en absoluto e nós, dende logo, reaccionaríamos», alertó el presidente gallego.

Rueda avisó que estas «negociacións bilaterais» son una posibilidad «moi preocupante», y subraya que «o lugar para falar de todo isto é onde están todas as comunidades autónomas co Goberno central, que é o Consello de Política Fiscal e Financeira». En la misma línea se había referido el martes Corgos, reclamando una negociación conjunta en este foro. Argumentó que esa posible condonación significaría una «mutualización da débeda», ya que supone repartir el déficit de las comunidades más endeudas con el resto del Estado.

El presidente de la Xunta reprochó al Gobierno en funciones que «tivo cinco anos» para reunir al Consejo de Política Fiscal y Financiera y abordar el debate, «que é o que están a pedir todas as comunidades autónomas, incluídas as do Partido Socialista». «Non se pode utilizar co único interese de ser investido ou de lograr uns apoios puntuais, iso é unha mostra de insolidariedade absoluta», subrayó, rechazando una condonación a aquellas comunidades autónomas que acudieron al Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) porque «non eran capaces de financiarse con normalidade, como si fixemos nós nestes anos».

Galicia es la única comunidad al margen de las de régimen foral que nunca acudieron al FLA para financiar su deuda sin recurrir a los mercados. Entrar en este fondo implica someterse a un mayor control de las cuentas por parte del Ministerio de Hacienda.

Recelos en el PP

Prácticamente todos los líderes territoriales han salido esta semana a rechazar una posible condonación de la deuda. El nuevo presidente valenciano, el popular Carlos Mazón, dijo este miércoles que defenderá una financiación «justa» para la Comunidad Valenciana porque su excepcionalidad «está acreditada» y no tolerará que su reforma «se negocie en un cuarto oscuro» con posibles «intereses de investidura o de separatismo o de los que claman por los países catalanes».

Pero el caso es que Valencia, al igual que Murcia y Andalucía, las tres gobernadas por el PP, han reclamado en numerosas ocasiones una reestructuración de la deuda con el FLA, al que acudieron para financiarse durante los últimos años. Siete de cada diez euros a deber de esta última autonomía son al fondo, mientras que el pasivo de las dos primeras con el FLA superan el 83 %.

Eso dificulta que los tres presidentes puedan oponerse a una quita, ya que les beneficiaría, pero rechazan que esa negociación sea bilateral con Cataluña. «No conviene mercadear, ni que se negocie en un cuarto oscuro de vete a saber qué intereses de investidura», añadió Mazón. La diputada electa de Compromís en el Congreso, Àgueda Micó, entre tanto, supeditó su apoyo a Sánchez a que asumiera la condonación de la deuda valenciana.

La consejera de Empleo de la Junta de Andalucía, Rocío Blanco, también criticó este miércoles una «condonación de deuda» a Cataluña como «trato de favor» a la Generalitat en el marco de las negociaciones para la investidura. «Los ciudadanos de Andalucía no pueden ser tratados de peor condición que una persona que viva en Cataluña», abundó.

Para el vicesecretario de Organización del PP, Miguel Tellado, una quita generalizada a las comunidades sería un «error» porque supondría «estar premiando a quien peor ha gestionado económicamente sus recursos y, por lo tanto, no es lo adecuado».

Pedro Sánchez se encontraría también con la oposición del socialista Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha, a esa condonación de la deuda a comunidades como Cataluña. Fuentes de su Ejecutivo apuntaban este miércoles en distintos medios que «no permitirán privilegios» a otras comunidades autónomas.