Los sindicatos de Telefónica piden aplicar los recortes de empleo también a los directivos

Sara Cabrero
S. Cabrero REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

VIOLETA SANTOS MOURA | REUTERS

Plantean la necesidad de reducir la afectación del ERE que, según la primera oferta de la firma, supondría la salida de 5.124 personas

12 dic 2023 . Actualizado a las 09:11 h.

Pocos avances y una distancia que parece acrecentarse. La reunión de este lunes entre Telefónica y los sindicatos, un encuentro que fuentes cercanas a la negociación calificaron de algo bronco, se cerró sin acuerdo. Más bien, lo que se logró es acrecentar los desacuerdos entre ambas partes. La empresa llegó a la mesa de negociación enrocada en su postura inicial: deben salir de la compañía un total de 5.124 empleados, que tendrán que ser los mayores de 55 años que tengan una antigüedad superior a los 15 dentro la firma de telecomunicaciones.

Al otro lado de la mesa se toparon con unos sindicatos indignados por la posibilidad de que esas salidas sean forzosas. Y estos dieron un paso más en su petición. Porque sugirieron que, con las condiciones actuales que sostiene la compañía para este proceso, la afectación también debería extenderse al área directiva. Es decir, que la tijera que quiere aplicar en la plantilla Telefónica, también se extienda entre los jefes de la empresa: «UGT no puede aceptar hablar de excedentes y reajustes que afecten solo a las personas trabajadoras sin conocer qué acciones se van a tomar en el área directiva, que ha tenido la responsabilidad de prever y evitar la situación actual. Si se produce una extinción de puestos de trabajo, ese mismo porcentaje de afectación y baremo de edad debe extenderse también al área de dirección que, por cierto, es la de mayor edad», señalaron en un comunicado.

Ante una situación que desde los sindicatos califican de injusta, la opción que pusieron ellos sobre la mesa pasa por una recualificación de trabajadores y el fomento de la «movilidad funcional voluntaria». Una de las mayores críticas que han vertido los representantes de los trabajadores es el «cambio de paradigma» que ha asumido la empresa en este nuevo recorte de su plantilla. Y es que mientras que en los procesos anteriores se recogía claramente la voluntariedad de los trabajadores para adherirse al plan de reducción, en esta ocasión Telefónica parece enrocada en enarbolar la bandera de la salida forzosa.

La teleco también se topó con una dura crítica por parte de los sindicatos, que pusieron en duda que todos los males que han llevado a la empresa a esta situación tengan que ver con agentes externos. Así, desde UGT, CC.OO. y Sumados-Fetico —los tres sindicatos presentes en las negociaciones— insisten en que no ponen en duda el impacto que haya podido tener el entorno macroeconómico en la actividad de Telefónica, pero advierten que no comparten que todos los factores el despido tengan carácter externo, como esgrimen desde la firma para ejecutar: «No compartimos la visión de que todos los factores sean externos, inevitables o no imputables a decisiones tomadas a lo largo de los últimos años en el seno de Telefónica».

Aseguran, también, que no es aceptable que la robotización o el uso de herramientas de inteligencia artificial dentro de la empresa acabe saldándose con una destrucción de empleo. Con todos estos mimbres, la propuesta que este lunes presentaron los sindicatos pasa por extender a todos los trabajadores la posibilidad de acogerse a unas salidas que, sí o sí, deben ser voluntarias.

Determinados grupos de edad

Es decir, Telefónica debe abandonar su idea de circunscribir el ERE a determinadas áreas y actividades o incluso a algunos grupos de edad: «Consideramos que no solo tiene que reducirse significativamente la afectación, sino que además el acuerdo que alcancemos debe ser universal, extensible a toda la compañía y debe posibilitar que, aquellas personas a las que la empresa no permitió acogerse voluntariamente al último plan de salidas individuales por pertenecer a un área considerada como crítica, ahora tengan la posibilidad de, si así lo desean, extinguir su relación laboral con Telefónica por esta vía», agregaron fuentes de los sindicatos.

Ambas partes deberían lograr un acuerdo antes del próximo 3 de enero, 30 días después del inicio formal de las conversaciones. Para lograrlo, aumentarán sus encuentros en los próximos días. De hecho, se espera que Telefónica y los sindicatos celebren reuniones el miércoles y el jueves de esta semana para tratar de avanzar en la negociación referente al ERE; mientras que este martes, el miércoles y el jueves, se reunirán para conseguir un acuerdo referente al convenio colectivo. Y no es esta cuestión baladí. Porque desde el primer momento, los representantes de los trabajadores deslizaron que no aceptarán uno sin el otro: «No habrá acuerdo en el ERE si no hay acuerdo en el convenio que blinde garantías y estabilidad».