El gigante de la venta por Internet debutará este viernes en el parqué
15 sep 2014 . Actualizado a las 07:00 h.El viernes es el día. La compañía china de venta por Internet Alibaba comenzará entonces a cotizar en Wall Street, en uno de los debuts más esperados de los últimos años. De momento, no ha defraudado. La empresa había previsto tener abierto el libro de órdenes de venta durante diez días, pero el interés de los compradores ha sido de tal envergadura que no ha hecho falta. Al segundo día ya estaban todas las acciones vendidas.
Todo lo que tiene que ver con esta salida a bolsa es superlativo. Para empezar, la propia compañía y sus historia. Alibaba fue creada en un pequeño apartamento de la ciudad china de Hangzhou, a cien kilómetros de Shangai, en 1999. Fue entonces cuando Jack Ma puso en marcha, junto a su mujer y a un grupo de 17 amigos, puso en marcha su negocio de venta por Internet. Entre todos habían conseguido reunir los 60.000 dólares con los que empezaron.
Quince años más tarde, Alibaba se convertirá esta semana en la protagonista de la mayor salida a Bolsa de la historia de Wall Street. En total, la empresa espera obtener entre 21.000 y 23.000 millones de dólares. Cifra muy superior a los ingresos que obtuvo Facebook, la mayor operación del sector tecnológico hasta el momento, que se quedó en 16.000 millones de dólares.
El hecho es que Alibaba ha despertado un interés enorme entre los inversores. Y en eso influye tanto su trayectoria como, y sobre todo, sus perspectivas de crecimiento. Hasta el momento, la compañía se ha centrado en la venta por Internet a través del ordenador. Pero el futuro es la venta a través del móvil y para eso China es el mercado ideal porque tiene 500 millones de usuarios de teléfonos inteligentes. Un enorme mercado esperando a Alibaba.
La empresa tenía a 31 de marzo de este año 255 millones de compradores activos. Una cifra que puede duplicarse con la incorporación del móvil.
Una estrategia brillante
Convertirse en la mayor firma de venta por Internet en China parece que le ha sido fácil a esta compañía, pero detrás de esa aparente facilidad están algunas apuestas que muestran una estrategia muy brillante. La primera fue la de confiar en que una característica del pueblo chino que es contraria al desarrollo de negocios de este tipo no sería un obstáculo insalvable. En general, los chinos desconfían de quienes no conocen. Que confiaran en que una web les iba a enviar efectivamente aquello que estaban comprando era un riesgo. Pero lo hicieron. Como también lo hicieron los minoristas que descubrieron que vender sus productos a través de Alibaba eliminaba costes y aportaba mayores beneficios.
Otra muestra de cómo funciona Alibaba nos la ofrece el pulso que le echó a eBay en China. La empresa estadounidense de venta entre particulares también era la primera en China con el 80 % del mercado de ese país. Pero Alibaba decidió que quería ese segmento también. A pesar de la preminencia de eBay, Alibaba lanzó en el 2003 Taobao, una palabra que significa la búsqueda del tesoro, y que se dedica a lo mismo que la estadounidense. En el 2007, la cuota de mercado de eBay en China se había reducido a menos del 8 %, poco después se retiró de aquel país dejando que Alibaba, o Taobao, hiciera su agosto.