La UE impide faenar en Guinea Conakry a barcos gallegos

espe abuín / cristina porteiro REDACCIÓN, BRUSELAS / LA VOZ

ECONOMÍA

Los cefalopoderos gallegos resultan de nuevo perjudicados por una decisión de la UE.
Los cefalopoderos gallegos resultan de nuevo perjudicados por una decisión de la UE. mónica irago< / span>

Incluye al país en su lista negra, junto a Camboya y Belice, por pesca ilegal

25 mar 2014 . Actualizado a las 12:08 h.

En una histórica decisión, el Consejo de Ministros de la Unión Europea acordó tomar medidas contra Camboya, Belice y Guinea Conakry como países no cooperantes en la lucha contra la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada (IUU, en sus siglas en inglés). Inaugurar esa lista negra supone, por una parte, que queda prohibida la importación en el mercado europeo de los productos de la pesca capturados por buques que enarbolen el pabellón de esos países. Pero, por otra, también que los buques de la UE deben interrumpir la actividad en esas aguas, dado que se vedan toda forma de cooperación, desde las licencias privadas, las operaciones conjuntas y mismo los acuerdos de pesca.

Y ahí está el problema. Que, al final, resulta que la realmente castigada es la flota comunitaria, en concreto la española, pues en Guinea Conakry estaban faenando con licencias privadas tres cefalopoderos gallegos -y se preparaban otros dos-, varios marisqueros de Andalucía, un puñado de palangreros de superficie y más de una decena de atuneros con tripulantes de Galicia a bordo. Todos con bandera española y, por tanto, «controlados por la caja azul desde Madrid, con el diario electrónico instalado y todas las demás medidas de control implantadas», señalan fuentes de la Asociación Nacional de Cefalopoderos, que subrayan que Europa no hace más que ponerles «flechas señalando un camino que conduce al desguace». Y es que en las aguas de Guinea Conakry habían buscado refugio cinco de los 16 expulsados de Mauritania que habían esquivado el despiece.

Intento de frenar el varapalo

Tanto el Consejo Consultivo de Aguas Lejanas en sesiones previas, como ayer el propio ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, según el sector, expusieron a la Comisión y al Consejo las nefastas consecuencias de que se aplique ese apartado del artículo 38 del reglamento contra la pesca IUU y abogan por que se evite tomar medidas que impliquen la expulsión de la flota española del caladero de esos países -en Belice también operan armadores atuneros-. De todos modos, su confianza en que se escuchen estas alegaciones es mínima. Dan por hecho que se consumará el contrasentido que supone que España no pueda pescar en Guinea ni exportar a la UE ese pescado y, sin embargo, «Corea, por ejemplo, podrá seguir vendiendo a la UE el producto que pesque en Conakry, puesto que el origen de ese pescado es Corea», señala Javier Garat, secretario de Cepesca. Este pone el acento sobre la falta de luz sobre los criterios que se han aplicado para castigar a esos países: «¿Por qué Conakry sí y, por ejemplo, Papúa no?», reflexiona.

En eso coincide Pablo Rodríguez, gerente de los atuneros de Anabac, que además de considerar la medida demasiado drástica, hace ver que otros países están amparando actividades ilegales y, sin embargo, no se ha actuado contra ellos.