Los principales grupos del país se rodean de líderes políticos retirados
19 may 2013 . Actualizado a las 13:23 h.Un día tuvieron poder. Mucho poder. Tanto como para gestionar miles de millones de euros de recursos públicos y tomar decisiones que podían cambiar el rumbo de un país entero. De vértigo. Ya no mandan como antes, pero se los rifan las empresas poderosas que quieren alimentar sus influencias políticas con los dos principales partidos que se alternan como inquilinos en la Moncloa y otros de ámbito autonómico. Expresidentes de Gobierno, antiguos ministros y políticos de primera línea han encontrado consuelo profesional como consejeros independientes o asesores externos en las principales compañías del país. El caso más reciente lo ha protagonizado el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, que abandona incluso el País Vasco, harto de vivir con escoltas, y se ha incorporado al Banco Santander en México.
Salvo José Luis Rodríguez Zapatero, al menos de momento, sus dos predecesores en el Palacio de la Moncloa, Felipe González (PSOE) y José María Aznar (PP), trabajan como consejero y en Gas Natural Fenosa y como asesor externo en Endesa, respectivamente. El primero se embolsa anualmente 126.000 euros y el segundo, 80.000 más.
En Endesa han encontrado cobijo también dos exministros socialistas de Rodríguez Zapatero. Los dos portaron la cartera de Economía. Pedro Solbes fichó como consejero de Enel, matriz italiana de la eléctrica española. También es consejero de Barclays, banco en el que está el exministro de Exteriores Marcelino Oreja, quien a su vez es consejero de Enagás. Elena Salgado, que además de ministra de Economía fue vicepresidenta del Gobierno, es actualmente consejera de Endesa Chile. Salgado aceptó el cargo antes de que discurriesen los dos años que marca la ley de incompatibilidades, pero el fichaje fue totalmente legal porque su puesto está fuera de España, en Chile.
Rodrigo Rato ha tenido una azarosa vida empresarial tras dejar el Gobierno de José María Aznar, con el que llegó a ser vicepresidente económico. Tras su aventura en el FMI y el fiasco total de Bankia -está imputado, de hecho, por ocultar información y maquinar para manipular el precio de las cosas-, Rato ha encontrado consuelo en Telefónica. La empresa lo nombró en enero consejero asesor para Latinoamérica y Europa.
Por los pasillos de Telefónica, Rato se encontrará de vez en cuando con un compañero de fatigas políticas, el exministro de Trabajo Eduardo Zaplana.
Otra ex, pero de Fomento y con el Partido Socialista, Magdalena Álvarez, tiró la cartera que tantos disgustos le dio -a ella y a los gallegos- y se recolocó en el Banco Europeo de Inversiones. Es su vicepresidenta.
La lista es larga. Miguel Boyer, exministro socialista de Economía, es consejero externo de Red Eléctrica; y Ángel Acebes, extitular de Interior con Aznar, fue fichado por Iberdrola como consejero externo con un sueldo de 216.000 euros al año.
El expresidente del PNV Josu Jon Imaz preside la petrolera Petronor y la Asociación de Operadores de Productos Petrolíferos (AOP).