El FROB hace perder todo su dinero a los inversores del Banco Gallego

s. vázquez / r. santamarta REDACCIÓN / LA VOZ

ECONOMÍA

Un grupo de accionistas, saliendo de la junta extraordinaria en un hotel de Santiago.
Un grupo de accionistas, saliendo de la junta extraordinaria en un hotel de Santiago. ÁLVARO BALLESTEROS< / span>

Accionistas denuncian que el Banco de España les ocultó una última oferta del luso BES

30 ene 2013 . Actualizado a las 12:30 h.

El FROB, el fondo de rescate de la banca, aprobó ayer la reducción y posterior ampliación de capital en el Banco Gallego, una operación que supondrá que todos los inversores (empresarios gallegos, principalmente, aunque también hay pequeños ahorradores y trabajadores del banco) perderán todo el dinero que han metido hasta la fecha en esa entidad. En total, alrededor de 125 millones de euros. El FROB es el primer accionista del Gallego, con el 49,85 % del capital. Ayer a la junta de acudieron accionistas por el 95 % del capital. Faltaron algunos pequeños e Inditex, entre otros. Por tanto, con su porcentaje al FROB (el Estado, en definitiva) le valía para sacar adelante la operación.

Lo hizo. Y enervó a los inversores. La decisión supone reducir a cero los 250 millones de capital del banco (125 de Novagalicia, el resto de los otros inversores), para cubrir el déficit patrimonial de la entidad. Y, a la vez, aprobar (junto a algunos otros pequeños socios) una ampliación de capital por 170 millones (ampliables a otros 192) para cumplir con los últimos requisitos del Gobierno.

El FROB pondrá, seguro, 80 millones. El resto lo tendrán que cubrir los otros accionistas, y decidirlo antes de un mes. Si no lo hacen, o no encuentran un socio, el Estado se hará con toda la entidad, el que parece ser su objetivo final. Si se nacionaliza al 100 %, el futuro pasaría por una subasta al mejor postor.

Es la tercera ampliación de capital que afronta el Gallego desde el 2008, y en ella sus accionistas han puesto 107 millones (la mitad, NCG).

¿Y hay novias a la vista? La cúpula del banco les dijo a los accionistas que sí, que cuenta con «varios pretendientes», sin entrar en nombres. El único que ha trascendido es el del portugués Banco Espíritu Santo (BES). El 31 de diciembre, según denunciaban algunos inversores, hizo una oferta no vinculante ante el Banco de España. Pero este no se lo trasladó a los inversores.

Denuncias judiciales

Fue la de ayer una cita «educada, sí, pero extremadamente tensa», explicaba un inversor. «Es un expolio en toda regla», apuntaba uno de ellos. «Llegaremos hasta donde haga falta, hasta la Audiencia Nacional si es preciso para defender nuestro dinero», agregaba otro. Esa vía, la de la demanda, fue enunciada en voz alta por varios de los accionistas durante la propia reunión, y el propio secretario de la junta dio cuenta de esa posibilidad. La primera posibilidad que se plantea es la impugnar la junta de ayer. No se atendió, por ejemplo, la petición de algunos inversores para que en lugar de reducir el capital a cero se dejara una parte, para evitar perder todo lo invertido.

Se abre así otro frente judicial de los empresarios gallegos contra el FROB tras realizar algo parecido en Novagalicia (reducir a cero).

El Banco Gallego está en una encrucijada. No es una entidad nacionalizada, pero el FROB es su primer accionista. Y la última reforma financiera (de noviembre) le da unos poderes extraordinarios. Tanto que puede eludir una sentencia o pasar por encima del derecho mercantil. Pero aunque no está nacionalizado (no ha recibido un euro público), le ha pasado cosas como esta: se ha visto obligado a traspasar activos a la Sareb (la sociedad inmobiliaria público-privada) por 1.025 millones de euros, algunos de ellos de muy buena calidad (sin mora). Y ha recibido a cambio 609 millones en bonos. Un palo a su balance.