En unas semanas tres grupos de cajas comenzarán a cotizar en Bolsa, otras cerrarán nuevas alianzas y todas, salvo dos minúsculas, pasarán a ser bancos, con mucho debate interno
12 jun 2011 . Actualizado a las 06:00 h.Un modelo económico, el de las cajas de ahorros, toca a su fin. Dentro de apenas dos semanas arrancará la gran conversión del sector con la salida a Bolsa de sus dos mayores entidades, Caja Madrid y La Caixa, convertidas ya en Bankia y Caixa Bank. Se abre un proceso que supondrá que todo el negocio financiero en España pasará a gestionarse desde bancos, con contadas excepciones, como las diminutas cajas Ontinyent y Pollensa, y las cooperativas rurales. Las consecuencias evidentes se verán en la dirección de esos bancos, con unos consejos con más presencia de gestores independientes, sin representantes laborales y con el mantenimiento de la obra social en el aire. Estos son los casos más destacados:
bankia
Un proyecto que medirá a todo el sector. «Bankia tiene que salir bien, sí o sí». Lo explicaba tan gráficamente esta semana un veterano dirigente sindical que conoce bien lo que se cuece en esa entidad. Bankia, el banco liderado por Caja Madrid y Bancaja, junto a otras cinco pequeñas cajas, saldrá al parqué previsiblemente el 13 de julio y algunas oficinas de la entidad -tienen varias decenas en Galicia- han comenzado ya a plantear a sus clientes la posibilidad de hacerse accionistas. Lo que suceda con Bankia servirá de termómetro para todo el sector. La de la tercera entidad financiera del país (solo por detrás de Santander y BBVA) es una operación que miran con lupa el Gobierno, el PP, el Banco de España y los mercados internacionales. Si sale mal, se pondrá en cuestión todo el modelo de bancarización. Si sale bien, otros podrán seguir la misma senda. La apuesta de Rodrigo Rato es arriesgada, pero se ha rodeado de bancos extranjeros y de ejecutivos expertos para salir al mercado a captar entre 3.000 y 4.000 millones, y podría rebajar su valor entre un 35% y un 40% para captar inversores.
caixa bank
El primero en afrontar su conversión. La Caixa ha sido pionera en muchas cosas, como en la expansión internacional, y ahora también en abordar la conversión de una caja en un banco. A través de un intercambio con Criteria, su brazo industrial, la nueva Caixa Bank cotizará desde el 1 de julio. La entidad sabe ya que cuenta con apoyo entre sus clientes porque la demanda de obligaciones convertibles (es decir, futuras acciones) desbordó la oferta. Planea llegar a 700.000 accionistas y tiene entre ellos al hombre más rico del mundo, Carlos Slim. En enero hizo un movimiento que ha servido de referencia al sector: valoró sus activos un 20% por debajo de lo escriturado. Al resto no les queda otra que hacer un descuento mayor.
banca cívica
Un incógnita en el parque. A lo largo del mes de julio saldrá a Bolsa esta tercera entidad, liderada por Caja Navarra y la andaluza Cajasol, y con una previsión de captar unos 800 millones de euros en el parqué. Estará condicionada por lo que suceda con Bankia. De hecho, sopesa operar en el mercado antes que Rato, aunque eso no gusta al Banco de España. Las tensiones entre los dirigentes de Navarra y de Sevilla por liderar el proyecto han dificultado la integración de sus cuatro socios.
banco mare nostrum
A la sombra de Caja Murcia. El grupo de cuatro entidades del área del Mediterráneo ha desistido de su plan inicial, el de salir a Bolsa. Quizá se lo plantee más adelante. Por ahora busca inversores privados con el gancho de la eficiente Caja Murcia, una entidad que, pese a estar en el epicentro del bum urbanístico, contuvo sus inversiones y apostó por la eficiencia.
catalunya caixa
Catalunya Banc llega de la mano del Estado. Fue la primera caja en completar todo su proceso de fusión (nombramiento de gobierno, cierre de oficinas, reducción de personal...) y ahora prepara su nuevo banco, que se llamará Catalunya Banc. La entidad contacta con inversores privados, pero su hoja de ruta es clara: su recapitalización vendrá exclusivamente de la mano del Estado, aunque juega con ventaja: al contrario que a la caja gallega, al suspender los test de estrés podrá tener fondos del Estado en forma de nuevos préstamos (algo que no se permite a otras) y también de capital. Los inversores privados entrarán a partir del 2013. Este caso es similar al de otra entidad catalana, Unnim, que sopesó fusionarse con otras para cumplir con los requisitos de capital.
Unicaja-españa-duero
Una nueva fusión a punto de completarse. A la malagueña Unicaja a la tercera le ha ido la vencida. Fracasó en su intento de quedarse con Caja Castilla-La Mancha y con Caja Sur. Ahora llevará el timón en una alianza a tres para evitar la entrada del Estado en Caja España-Duero. Las discrepancias están en la composición del gobierno del banco y en el blindaje (cargo y sueldo) que buscan los consejeros de la caja leonesa.
cam
A semanas para la entrada del FROB. El Estado, es decir, el capital público del FROB, entrará en al menos cuatro entidades, entre ellas la gallega. La primera será la CAM, en julio, y previsiblemente para ejecutar una inyección millonaria que acabará nacionalizando esta caja alicantina tras romperse su alianza con Banco Base.
caja asturias-cantabria extremadura
Con Cajastur al mando. Effibank (no es nombre definitivo), el antiguo Banco Base, ya tiene gobierno. Con el asturiano Manuel Menéndez como poderoso presidente y consejero delegado y su entidad ocupando una amplia mayoría del consejo, busca ahora inversores privados que acompañen.
cajas vascas
A expensas de Bildu. Quería el Gobierno despolitizar las cajas, pero la política puede frustrar el anhelo por crear la gran caja vasca. Bildu, con poder en diputaciones y ayuntamientos, no quiere esa operación y estudia cómo paralizarla. Le apoyan los sindicatos, que en las reuniones para abordar el plan laboral han rechazado la bancarización.
QUIÉN ES QUIÉN los tres protagonistas de la transformación
Banco de España
El gobernador impuso severas condiciones
Ministerio de Economía
Principal impulsora del decreto de bancarización
La Caixa
Al frente de la CECA, fue el primero en iniciar la bancarización