Microsoft cede ante la UE e introducirá cambios para que sus rivales puedan fabricar programas compatibles

Fernando Pescador

ECONOMÍA

23 oct 2007 . Actualizado a las 02:04 h.

Microsoft ha arrojado la toalla en su disputa con la Comisión Europea. Tras una serie de negociaciones al máximo nivel, mantenidas entre la comisaria de Competencia, Neelie Kroes, y el presidente del gigante informático, Steve Ballmer, que concluyeron a las 7 de la mañana de ayer, Microsoft ha accedido a una amplia batería de demandas que le fueron formuladas por el Ejecutivo comunitario en el 2004. Entre ellas figura la de facilitar información técnica a los fabricantes de software para que puedan desarrollar productos compatibles con Windows.

La comisaria Kroes daba a mediodía la noticia con ostensible satisfacción y expuso los principales puntos del acuerdo, que pone fin a la disputa legal que comenzó hace nueve años con la acusación contra el gigante americano de abusos de posición dominante en el mercado de los sistemas operativos.

Código abierto

Microsoft acepta facilitar información técnica sobre servidores de trabajo en grupo a los fabricantes que desarrollan programas en código abierto, como el popular Linux, para que puedan crear productos compatibles con Windows, sistema operativo presente en alrededor del 95% de los ordenadores personales del mundo.

Por revelar esta información, Microsoft reclamaba una cuota del 2,98% sobre los ingresos que se obtuvieran los competidores gracias a ella, aunque finalmente Ballmer ha aceptado librarla contra un único abono de 10.000 euros.

Rebaja en las licencias

La empresa norteamericana también reducirá el coste de las licencias a nivel mundial que incluyan patentes, que costarán un 0,4% de los beneficios que obtenga con ella la compañía compradora, en lugar del 5,95% inicialmente impuesto por la empresa norteamericana.

El gigante informático tendrá que seguir facilitando toda la información sobre sus nuevos productos, como el sistema operativo Windows Vista, y sobre los que desarrolle en un futuro.

Bruselas aún tiene que establecer la cantidad total a la que ascenderá definitivamente la multa, que se sumaría a las abonadas de 497 y 280 millones.

La comisaria Kroes afirmó que el resultado de estas gestiones es «un triunfo del consumidor», y que el impacto y la repercusión de estos cambios «comenzará a sentirse inmediatamente, y se prolongará durante años». ?También reveló que las negociaciones comenzaron hace varias semanas en un restaurante en Holanda, después de que la Justicia europea confirmase el mes pasado las sanciones impuestas por la CE a Microsoft en el 2004.