?a Consellería de Educación informó ayer de que la crisis de Arriva no afectará a los servicios de transporte escolar en el mes de septiembre. La Xunta asegura que, aunque la multinacional británica tiene que renovar 45 vehículos, ésta se ha comprometido a resolver el problema antes del 10 de septiembre. Néstor Valcárcel, secretario general de Educación, explicó ayer a este periódico que la Administración gallega ya se ha puesto en contacto con las asociaciones del transporte por si es necesario que otras empresas cubran rutas de Arriva en el caso de que la empresa británica no pueda hacerlo. «Es cierto que existe este problema; nosotros, en primer lugar, tenemos el compromiso de Arriva de que los va a solucionar pero, en caso de que no pueda, pondremos en marcha otras alternativas», aseguró ayer el secretario general de Educación. Promesa Néstor Valcárcel, además, agregó que «los 6.500 alumnos de las 180 rutas escolares que cubre Arriva tienen garantizado su servicio de transporte de un modo u otro; desde la Xunta queremos hacer un llamamiento a la tranquilidad porque los alumnos de todos esos municipios dispondrán de este servicio». La empresa Arriva afronta una grave crisis económica derivada de sus graves problemas de gestión. Sus pérdidas anuales superan los dos millones de euros. La legislación autonómica vigente en materia de seguridad le obliga a renovar 45 autobuses que tienen más de 16 años de antigüedad, pero la compañía de transporte ha visto cómo apenas le queda tiempo para resolver este problema antes del 10 de septiembre, que es cuando comienza en la comunidad gallega el curso escolar.