Las actuaciones están bloqueadas por la negativa o el retraso de los concellos a conceder la licencia Las compañías quieren que se eliminen trabas burocráticas para ejecutar obras
25 jul 2002 . Actualizado a las 07:00 h.Más de medio centenar de proyectos de mejora de la red eléctrica gallega están paralizados en la actualidad por retrasos en la concesión de las licencias o en la tramitación de los expedientes por parte de los ayuntamientos. Algunas de estas actuaciones llevan años en los «cajones municipales», por lo que las compañías del sector exigen al Gobierno que elimine buena parte de las trabas burocráticas con las que se encuentran a la hora de ejecutar estas obras. Unión Fenosa es la empresa más afectada por esta situación debido a su fuerte implantación en Galicia, donde es líder de largo respecto a sus competidoras. Un total de 45 proyectos del grupo repartidos por las cuatro provincias tienen en estos momentos problemas en su tramitación en los ayuntamientos, que ponen trabas a la concesión de las licencias en la mayoría de los casos por la fuerte oposición vecinal o el incumplimiento de aspectos en materia medioambiental. Extensión de red En la mayoría de los casos, se trata de obras de extensión de tramos de red, de desarrollo de líneas de media y baja tensión o la construcción de centros de transformación. A Coruña es la provincia con más actuaciones paralizadas: dieciséis. Paradójicamente, municipios de la zona de Barbanza como Rianxo, Ribeira, A Pobra, Noia o Boiro han frenado obras a pesar de que en los últimos años han sufrido deficiencias en el suministro de electricidad. Fenosa cuenta con otros doce proyectos bloqueados en Lugo, siete en Pontevedra y cuatro en Ourense. Se da la circunstancia de que la provincia pontevedresa cuenta con el ayuntamientos más «incómodo» para los intereses de la eléctrica gallega: O Porriño. La corporación de este municipio mantiene inmovilizadas cuatro obras para extender líneas de media tensión, que se completan con la construcción de algún centro transformador o líneas de baja tensión. Vigo, Castrelo de Miño, Coles, Sarria, Rianxo o Ordenes son otros de los concellos «molestos» para Fenosa. Las obras más polémicas La provincia de Pontevedra alberga también dos de las obras de Fenosa que mayor polémica han generado en la última década y que todavía no han visto la luz. La subestación de El Castro, «imprescindible», según la compañía, para dar servicio a Vigo no ha sido puesta en funcionamiento por mandato judicial, mientras que la subestación de Sanxenxo se planificó a principios de los 90 pero la obra no ha sido ejecutada por la falta de permisos y la fuerte oposición vecinal. Red Eléctrica e Iberdrola son otras de las compañías que han visto paralizados algunos proyectos de mejora en Galicia por el retraso en la tramitación de los expedientes por parte de ayuntamientos e incluso la Administración autonómica.