El BNG lleva a los plenos de A Estrada, Silleda y Cruces el rechazo a los macroviñedos

La Voz LALÍN, A ESTRADA / LA VOZ

SILLEDA

Cedida

26 nov 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

El BNG presentará este lunes mociones en los concellos de A Estrada, Silleda y Vila de Cruces para mostrar su rechazo a las plantaciones intensivas de viñedos en la subzona del Val do Ulla, en la Denominación de Orixe Rías Baixas. Quieren que las corporaciones trasladen su apoyo a los vecinos afectados y demandar que esas actuaciones se hagan en todo caso de manera ordenada y respetando los medios y modo de vida en este valle.

La formación nacionalista resalta que el mayor problema y preocupación se en encuentra en la actualidad en Vedra y Boqueixón. Pero también inciden en que el proceso continuará y afectará «moi probablemente da mesma maneira á parroquia silledense de Cira, ás cruceñas de Gres, Camanzo e Añobre, e as estradenses de Baloira, Santa Cristina, San Miguel de Castro e Arnois». En la moción plantean solicitar a la Xunta un catálogo de usos y orientaciones productivas que contempla la Lei 11/2021 de Recuperación da Terra Agraria de Galicia y que sea preceptivo informe municipal para cualquier cambio de uso de suelo forestal y agrario para plantación de viñedos de forma intensiva en estos tres municipios de Deza y Tabeirós.

Además, piden estudios rigurosos por parte de los gobiernos locales sobre los efectos que puedan ocasionar esas plantaciones de vid a nivel ambiental, económico y sinérgico, además de garantizar que se respeten las masas de bosques autóctonos y la protección de los entornos de los núcleos rurales y viviendas y de las explotaciones agrarias ecológicas y sostenibles. Y de las «brañas, humedais e zonas de ribeira dos cursos fluvialis, así como a aceptación social de dito proxecto».

Talas de bosque autóctono

Los portavoces municipales del BNG de A Estrada, Xoán Reices, de Silleda, Erea Rey, y de Vila de Cruces, Álex Fiuza, anunciaron ayer esta moción para regular esas plantaciones de viñedos en el Val do Ulla a pie de campo, en concreto en la realizada en Camanzo, «onde se talou unha carballeira enteira». Y es que aducen que esta conversión a cultivo está motivando talas de grandes masas de bosque autóctono e incluso de ribera. Además se reducen y eliminan tierras de uso agroforestal y la disponibilidad para explotaciones ganaderas, aumentándose el precio del terreno que imposibilita en la práctica incrementar la base territorial de la mayor parte de las granjas.

El uso de la fertirrigación con el consiguiente consumo de agua, además de la aportación de fertilizantes con afección a acuíferos y salinización del sustrato también preocupa con estos cultivos intensivos. El empleo de herbicidas y el control de flor adventicia son otra preocupación por los daños que pueden generar en el modelo agrario de la zona.