La Policía Local busca a un conductor que se dio la fuga en Lalín tras atropellar al trabajador de un mesón que cruzaba para echar la basura
25 abr 2023 . Actualizado a las 05:00 h.A eso de las 1.00 horas de la madrugada del domingo, un trabajador del mesón A Cunca salió del restaurante, en la rúa Colón, para echar la basura. Los contenedores más próximos al establecimiento son los que están bajando por el lateral del parque de Loriga. Al cruzar la rúa Ramón Aller por el paso de peatones situado al lado de una zapatería fue arrollado por un turismo. El conductor paró y llegó a bajarse pero volvió a subir al coche y se dio a la fuga.
El herido quedó tirado en el suelo y fue auxiliado por las personas que pasaron por allí. El primero en llegar fue el párroco de Lalín, Marcos Torres, que explica que venía de Lugo en coche y al pasar por la calle en dirección a O Regueiriño vio un montón de cajas tiradas en el suelo y a una persona. Paró, se bajó y pudo ver a un hombre increpando al herido. Explica que «lle estaba berrando e botando a bronca dicindo que lle tirara as caixas encima do coche cando as caixas caerían polo golpe que lle deu». Le preguntó que pasara y al decirle que había que llamar a la Policía, al ir al coche a buscar el móvil para pedir asistencia, el conductor se subió al vehículo y arrancó dándose a la fuga. Marcos Torres señala que «non pensei que puidera facer iso, colleume totalmente de sorpresa» y cree que cuando dijo que iba a llamar a la Policía Local, ese pudo ser el detonante para que el conductor optara por irse de allí.
El trabajador llevaba el uniforme con el nombre del local y eso hizo que además de avisar a una ambulancia lo hicieran también al local. Los servicios sanitarios trasladaron al herido al hospital Clínico donde fue atendido. Sufre el aplastamiento de una vértebra, a la que se suma alguna más con algún problema por el golpe, y una lesión en la mano derecha. Le quedan unos dos meses de reposo. Ayer explicaba que «pudo ser moito peor» y estaba convencido de que «salváronme as caixas de cartón e de plástico que levaba» que cree que ayudaron a amortiguar un poco el golpe.
Toma de declaraciones
Los agentes de la Policía Local recibieron el aviso del accidente ya esa noche a los pocos minutos de producirse y se desplazó ya hasta allí una patrulla que inició las indagaciones en busca del autor del atropello. Tomaron declaración a las personas que estaban cerca del lugar del accidente, entre ellos los que llegaron en los primeros momentos a socorrer al herido, pero también buscaron pistas hablando con los clientes de los establecimientos hosteleros cercanos.
Muchos de los que se acercaron, apuntaba ayer el herido, eran clientes de A Cunca, que lo reconocieron de inmediato y agradecía la atención y la amabilidad de Torres y de los que lo atendieron aunque en este momento estaba en estado de schok y tiene algunas lagunas. Tras el golpe se vio tirado en el suelo herido. La Policía Local contó con varios testimonios que aportaron datos sobre las características del conductor y del coche. Alguno de los que lo oyó gritar y vociferar apuntaba incluso la posibilidad de que este se pudiera encontrarse bajo los efectos del alcohol.
Al huir del lugar del accidente, además de hacer frente a los daños sufridos por el herido, el conductor podría acabar siendo acusado de un delito de omisión de socorro. El Código Penal establece en estos casos posibles penas que van desde tres meses de multa a cuatro años de prisión.
El conductor circulaba en dirección a la Plaza dos Cabalos cuando se produjo el accidente. Cuando el trabajador salió del establecimiento aún estaban a punto de irse algunos clientes que al dejar el local se encontraron con el suceso, al igual que algunos otros viandantes.
Los datos aportados por los testigos del suceso fueron poniendo a los agentes en la pista de cara a la identificación del conductor, que al bajarse del coche, pudo ser visto por más de una persona. Unos datos sobre el conductor y el coche que pueden ser determinantes.