El restaurante La Robleda reabre hoy sus instalaciones en Vilatuxe después de unas reformas diseñadas por Marcango
12 oct 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Coincidiendo con la celebración hoy del Día de la Hispanidad, Parrillada La Robleda abre de nuevo sus puertas en Vilatuxe (Lalín), después de acometer una serie de trabajos de reforma en sus instalaciones. La Robleda, la primera parrillada que comenzó a funcionar en Galicia, acaba de cumplir cincuenta años de vida; una importante efeméride para los actuales responsables del establecimiento que pretenden celebrarla por todo lo alto en el próximo año cuando la situación sanitaria sea completamente óptima y la pandemia controlada.
Pero para hablar del nacimiento de La Robleda hay que recordar a Eladio Rodríguez e Irene Louzao, el matrimonio visionario de un negocio que se convertiría en pionero en Galicia, y al que le surgirían cientos de locales de similares características por toda la comunidad con el paso de los años.
Manteniendo el nombre del local acuñado por sus padres, Isabel Rodríguez Louzao sigue llevando con maestría las riendas del negocio familiar, junto a su marido Toño González, en el que realizaron varias reformas a lo largo de los años pero sin perder en ningún momento su esencia fundacional. No cambió tampoco la filosofía instaurada por Eladio e Irene de aportar calidad en los productos y buen trato al cliente, dos premisas que han mantenido Isabel y Toño.
No han sido, reconocen los responsables de la parrillada, meses fáciles para el gremio de la restauración; y para su establecimiento tampoco, pero miran el futuro con esperanza. Y en ese camino de ver un rayo de luz después de semanas de restricciones, apostaron por llevar a cabo una nueva reforma en las instalaciones que afectó fundamentalmente a la iluminación, pintura y decoración de la totalidad de las dependencias; tanto en los comedores de sala como en barra. Tareas de las que se encargó el artista Marcango, nieto de los fundadores de A Robleda.
La dirección de A Robleda no tiene previsto realizar ninguna fiesta de reapertura ya que el gran festejo tendrá que esperar todavía unos meses explica Toño González; «a idea é celebrar os cincoenta anos da parrillada, que se cumpriron no verán, no próximo ano 2022 cando a situación sanitaria estea xa superada».
El anhelo más inmediato: poder trabajar con normalidad después de tanta zozobra, «ofrecerlle á clientela o mellor churrasco posible con produtos de calidade, manter unha ampla carta e intentar que a xente disfrute e se sinta a gusto con nós».