La Banda de Lalín y la «normalidade musical»

Javier Benito
j. benito LALÍN / LA VOZ

LALÍN

miguel souto

Quiere organizar un desfile por las calles el primer día que sea posible y retomar la música de cámara

07 may 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

La Banda de Lalín decidió diseñar su propia desescalada y transición hacia «a normalidade musical» a través de dos propuestas de actividades artístico-sociales adaptadas a la realidad generada por la pandemia. El primer proyecto se bautizó Banda de Lalín: paso a paso, en marcha. Plantean un desfile por las calles lalinenses el primer día que sea posible cumpliendo la normativa de las autoridades.

«Dende a Banda de Lalín queremos ser os primeros en estar activos, e a música que tanto nos une e nos gusta facer xuntos brotará de novo para compartir con todo o pobo», resaltan, incidiendo que buscan ofrecer «unha manifestación do civismo e dea seguridade sanitaria, xa que na súa realización esíxese gardar as distancias de precaución recomendadas entre os nosos músicos». «Tamén queremos solidarizarnos tratando de achegar a música preto das vivendas dos nos veciños», comentan.

La segunda iniciativa se denomina Cadros dunha nova exposición. Ante las limitaciones de aforo recomendadas para celebrar ensayos o conciertos, la banda lalinense prevé retomar la actividad con un formato de música de cámara con el que ofrecer un proyecto artístico global. Con la obra Cadros dunha exposición, de Modest Mussorgsky, y partiendo de su versión original para piano, se está elaborando ya una instrumentación en la que se reparten los distintos fragmentos en distintos ensembles de la banda. De esta forma la pieza se distribuye en distintas secciones de cámara y se pueden realizar ensayos por separado, con grupos de instrumentistas limitados.

En este segundo proyecto se prevé integrar varias artes -desde pintura a fotografía, literatura o danza además de la música- como mensaje derivado de la crisis del covid-19, es decir, ensalzar que la cooperación y la colaboración «fainos máis fortes». El futuro concierto intentará concatenar los fragmentos musicales hasta completar la obra de principios a fin con los distintos ensembles de la banda, articulando el escenario en diferentes espacios para movilizar a los grupos durante la interpretación. La interpretación musical irá simultaneada con la proyección de cuadros de Viktor Hartmann, trabajándose también en simultanear fotografía y literatura relacionada con la temática de cada cuadro e incluso la opción de integrar la danza.

La adaptación de la obra a nuevas tímbricas, dicen, busca ofrecer un mensaje de la «nova normalidade» ante los cambios generados en la vida diaria.