El Embutidos sigue en estado de gracia, y ayer logró dos puntos en casa del Camariñas que le permiten avanzar puestos en la tabla y afrontar el último partido de la primera vuelta con una sonrisa en la cara. El triunfo sobre los coruñeses podía haber sido un paseo marcial de no ser por la actuación de los árbitros. Los colegiados, con decisiones incomprensibles, asumieron protagonismo en un partido que el Lalín manejó con comodidad de principio a fin. Detalles como jugar el partido con un balón amarillo en vez del verde oficial, no llevar la cuenta de los anotadores o permitir errores a la mesa que le costaron a Gustavo 30 segundos más de exclusión, fueron algunos de los detalles que desquiciaron al Lalín, que lamentó haber visto un par de exclusiones por comentarios.
Más allá del protagonismo arbitral, lo cierto es que el Embutidos no permitió que la euforia se apoderase del equipo y afrontó con seriedad el partido. Los minutos iniciales fueron un intercambio de goles que dieron paso a un mayor control visitante. El Embutidos se fue haciendo con la batuta del partido y abriendo margen con el Camariñas hasta ponerse siete arriba. En los últimos quince segundos de la primera mitad el Lalín perdió un balón que el rival convirtió en gol y que estuvo acompañado de una exclusión a Bruno por protestar.
A pesar de arrancar la segunda mitad en inferioridad numérica, la defensa rojinegra capeó el ataque rival y mantuvo distancias. El Lalín perdía entonces a Roberto Granja 4 minutos, dos por acción y otros dos por hablar, justo cuando el partido estaba para romperse, por lo que tocó aguantar de nuevo. El Embutidos consiguió mantener su rédito y finalizó el partido con tranquilidad.
Seriedad e intensidad
El ataque rojinegro estuvo afortunado en Camariñas y muestra de ello fueron los 20 goles del primer tiempo. En las labores ofensivas la escuadra rojinegra estuvo muy seria en ataque estático pero encajó la mayor parte de los goles en acciones de contraataque, puesto que el Camariñas fió todo su juego ofensivo a las contras veloces.
Alfredo Fernández, tras el partido, se mostraba muy satisfecho por el resultado. «Son dos puntos importantísimos, llevamos todo el partido con comodidad y no les dejamos respirar. Fue una pena no romperlo antes para dar más minutos a los más jóvenes, pero aún así, Brais ya debutó». El técnico lamentó la «locura de arbitraje» vivida y subrayó que «por fortuna fue un partido que llevamos siempre muy cómodo». Recordó además que el Embutidos ha sumado 9 de los últimos 10 puntos que se ha jugado.
Tanteador cada 5 minutos: 3-4, 5-6, 9-10, 11-15, 12-18, 14-20 (descanso); 17-23, 18-24, 19-26, 22-30, 27-33, 31-35 (final).
Árbitros y exclusiones: Manuel Mohedano y Daniel López (Castilla La Mancha). Excluyeron a los locales Salva, José Ramón y Xabier (2), y a los visitantes Pincho, Gustavo, Bruno (2), Roberto Granja (2), Marco, Roberto Álvarez.
Incidencias: Encuentro disputado en el pabellón de Ponte do Porto.
Víctor, Borja (10, 2 de p), Moncho, Salva (2), Catalán (10), José Ramón (1), Xabier (1) -siete inicial- Cristian, Fari (4), Felipe (1), Pombo (1), Damián (1), Antelo (2), Perón
Pablo, Pincho (8), Ramón (2), Gus (4), Bruno (4), Roberto Granja (4, 2 de p), Marco (8) -siete inicial- Durán, Roberto Álvarez (4, 1 de p), Losón, Brais, José, Canario (1)