La asociación O Castro da Fervenza resucitó la tradición y celebró una fiesta que tendrá continuidad en 2019
18 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Los Maios volvieron a florecer ayer en A Estrada gracias al empeño de la Asociación Cultural O Castro da Fervenza de Callobre. Aunque el municipio nunca fue zona de gran despliegue de Maios, en su día, la llegada de la primavera se festejó a con los tradicionales bailes de cintas en algunos centros educativos. Con el paso de los años, la tradición se fue perdiendo y solo quedó como testigo alguna xesta colgando de la matrícula de algún coche.
Para enraizar la tradición, la asociación se inventó este año la Festa dos Maios, que ayer celebró su primera edición en el castro de la localidad. Una caminata a pie a la cascada de Callobre abrió el apetito para la comida campestre. A continuación vinieron los Maios. No fueron muchos, pero los suficientes para despertar la ilusión por repetir en el 2019. Los colegios de O Foxo y Codeseda presentaron dos estructuras. La tercera fue aportada por la asociación de mujeres de Callobre.
Los estudiantes de O Foxo dieron vida al vistoso baile de las cintas y los de Codeseda protagonizaron otro con palillos. Canciones y juegos tradicionales animaron la tarde. Las randeeiras volvieron a balancearse en los árboles y la llave y los aros a ser la mejor propuesta lúdica. Hubo también un taller de loita galega al aire libre y otro de iniciación a la pandereta a cargo de una de las integrantes de Tanxugueiras.
El presidente del colectivo organizador, Sindo Pereiras, no ocultó cierta decepción. «Contaba con que algún colexio máis se apuntara», confiesa. «Aínda así foi un éxito. Estas cousas empezalas costa. Ninguén dixo que fora fácil, pero no 2019 seguiremos», anunció.