El colectivo ha tenido que desembolsar miles de euros para legalizar el legado
19 oct 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La agrupación estradense de Cáritas ha puesto a la venta las primeras propiedades que ha conseguido formalizar a su nombre de la herencia recibida hace ahora un año de un vecino del municipio. La herencia incluía varias fincas rurales, un solar urbano y un par de edificios en el casco urbano. Sin embargo, el legado no era tan jugoso como pudiera parecer. El mal estado de conservación de los inmuebles y la necesidad de cumplimentar numerosos trámites administrativos y burocráticos generó cuantiosos gastos. El pago de hipotecas pendientes, los gastos de mantenimiento de las propiedades ola forzosa contratación de peritos, abogados, notarios, gestores o tasadores obligaron a realizar un desembolso de varios miles de euros y a solicitar incluso una hipoteca. Esta es la razón por la que Cáritas ha decidido poner a la venta algunas de las propiedades heredadas, con la intención de reducir el impacto económico y tratar de poner en valor otras que le gustaría destinar a fines sociales.
La existencia de inquilinos en algunos de los inmuebles impide disponer de ellos en este momento. En otros, en cambio, la tramitación burocrática ha concluido y no hay nada que impida ahora ponerlos a la venta. En este caso están un edificio con bajo y tres plantas en la calle Pérez Viondi que fue tasado en 230.000 euros y un solar edificable en la Avenida de Benito Vigo —justo al lado del establecimiento comercial Zoosan— que se vende por 106.000 euros. También se han puesto en venta varias fincas rurales en la zona de Guimarei.
Algunas personas han contactado ya con Cáritas en las últimas semanas interesándose por negociar el precio de alguna de las propiedades. No obstante, existe un precio de tasación oficial que es el que regirá la operación de compraventa.
La herencia incluía además un edificio con bajo y dos plantas que está justo al lado de la entrada al colegio Pérez Viondi. En este caso, la pretensión de Cáritas no es ponerlo a la venta, sino conservarlo para fines sociales. El objetivo de la institución es conseguir a través de las ventas liquidez para hacer frente a todos los gastos que ha generado hasta ahora la tramitación de la herencia y para acondicionar las propiedades que podrían proporcionarle un servicio. Es el caso del edificio colindante con el CEIP Pérez Viondi, que Cáritas ve con buenos ojos para convertir en alojamiento provisional para personas sin techo que recalen en el municipio. No obstante, para poner destinarlo a este fin se necesitaría un trabajo previo de acondicionamiento. Además, sería necesario contar con una red de voluntarios que garantizase la atención del servicio, para darle entrada y salida a los transeúntes que acudiesen para utilizar ese posible alojamiento.
Hasta ahora, Cáritas ofrecía este servicio de acogida temporal a personas sin hogar de paso por el municipio ofreciéndoles una noche de alojamiento y una comida en un modesto hostal de la localidad. Sin embargo, con el cierre de este negocio, la situación se ha complicado. El presupuesto de Cáritas A Estrada no da para costear otras opciones de alojamiento en la zona con lo que, por el momento, la entidad se limita a pagarle el almuerzo a los sintecho, que no tienen más opción que seguir ruta hacia otras zonas con albergues con plazas reservadas para esos fines.
La utopía de un albergue propio
En este contexto, disponer de un inmueble propio debidamente acondicionado para atender a los transeúntes sería para Cáritas de A Estrada una de las mejores formas de sacarle partido benéfico a la herencia, haciéndola revertir en los más necesitados. No obstante, todavía queda mucho camino que allanar antes de poder ver esta idea hecha realidad.