La actividad en las urgencias del CHUS creció tras el fin de semana con 88 ingresos
DEZA
La gripe A sigue zarandeando a los profesionales del servicio de urgencias del Complejo Hospitalario Universitario de Santiago (CHUS). Aunque se encuentra lejos de los niveles de sobrecarga que se llegaron a registrar hace poco más de una semana, el número de enfermos volvió a crecer tras el oasis del fin de semana. Como ocurre a menudo, el lunes volvió a convertirse en la jornada de más trabajo de la semana. En esta ocasión, se atendieron a 456 personas, de las que 384 eran adultos y 60 críos. En obstetricia y ginecología se trataron a las 12 personas restantes.
Fuentes del servicio confirman ese repunte, aunque reconocen que la situación ha mejorado, ya que la apertura de camas en planta ha permitido que la atención de los enfermos que se encuentran en los boxes, ergo los que están en peor estado, sea más cómoda. Entre la madrugada del lunes y la de ayer, 88 pacientes fueron ingresados en planta, casi un 20 % del total, cifra nada baladí que demuestra que la gripe A sigue golpeando con fuerza.
Desde la Consellería de Sanidade informaron ayer que la campaña de vacunación continúa activa y se pide, especialmente a los mayores de 65 años, a que acudan a sus centros de referencia a inocularse el vial. En los datos que ofrece la gerencia del área sanitaria de Santiago y Barbanza sobresale que el número de pacientes hospitalizados llegó ayer a la mañana los 931. La ocupación de las camas continúa en el 81 % en las unidades de cuidados intensivos; lo mismo que en el área quirúrgica. En pediatría ha caído hasta el 40 %.