Un estradense se impone en los Óscar de la fotografía con una aurora boreal

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA / LA VOZ

DEZA

cedida

Felipe Souto ganó una medalla de oro en el prestigioso certamen Trierenberg

29 abr 2021 . Actualizado a las 09:52 h.

El concurso de fotografía Trierenberg Super Circuit es un prestigioso certamen internacional en el que participan fotógrafos consagrados de todo el mundo. Los expertos equiparan estos premios de fotografía, que se entregan en la localidad de Linz (Austria), con los Óscars cinematográficos.

En la edición de este año, que acaba de fallarse, han participado 16.800 fotos enviadas desde todos los rincones del planeta. El estradense Felipe Souto también ha probado suerte. Ha remitido cuatro fotos -otros participantes han enviado hasta 40- y, con una de ellas, ha conseguido una de las tres medallas de oro que el jurado concede en cada categoría.

La foto ganadora fue tomada en febrero del 2019 en la localidad de Hamnoy, en las islas Lofoten (Noruega). Se impuso en la categoría de fotografía panorámica y muestra una impresionante aurora boreal en una región situada hacia los 67 grados de latitud norte del Círculo Polar Ártico, donde en invierno se pueden alcanzar temperaturas extremas de hasta 40 grados bajo cero. El día que el estradense disparó con su cámara había 25 grados bajo cero. Capturar y congelar una aurora boreal en esas condiciones climatológicas no es tarea fácil.

Felipe Souto, que solo se ha presentado a cuatro concursos en su vida y ya tiene varios premios en su vitrina, se sentía ayer pletórico. «É unha honra gañar nun concurso no que participan fotógrafos recoñecidos internacionalmente, como os italianos Isabella Tabachi ou Enrico Fossati, que foi mestre meu, ou os americanos Miles Morgan ou Marc Adamus», cuenta.

A Felipe solo le entristece un detalle: no haber ganado con una fotografía de Galicia. «Outra das imaxes que presentei era unha foto do faro de Punta Nariga, de César Portela. Gustaríame ter gañado con ela», explica. Esta imagen, no obstante, ya cuenta también con un premio. Fue elegida entre miles de imágenes como foto del día en el certamen Photopiller y seleccionada luego como foto del mes de febrero.

También la imagen que ha llegado a la alfombra roja tenía un reconocimiento previo nada despreciable: medalla de plata en el concurso Epson de panorámicas.

Un bombero enganchado a los viajes que ahora captura cascadas

Felipe Souto creció en A Estrada. Su padre era de Codeseda, su madre de Tabeirós y él es estradense orgulloso de sus raíces rurales. Al acabar el instituto sacó plaza de bombero en el sector aeronáutico, una profesión que era su sueño desde niño y en la que ya lleva 17 años. Fue bombero en los aeropuertos de La Palma, Peinador y desde hace tres años ejerce en el de Santiago. Sus otras grandes pasiones son la fotografía y los viajes. De pequeño jugaba con una Rolleyflex y, pasados los años, acabó estudiando fotografía artística en la Escuela de Arte de La Palma y en la escuela Grisart de Barcelona. Se perfeccionó al lado de los grandes maestros internacionales. El retrato es su debilidad. Igual que los viajes. Ha recorrido medio mundo con su cámara. Ahora que el covid-19 le ha cerrado las fronteras está centrado en las cascadas gallegas. «Temos ríos por doután e tempo gris propicio para crear atmosferas máxicas, de conto», dice. «Ogallá algún día gañe un premio cunha foto da Estrada», desea.