DepoDeza licita en 193.600 euros estudios de la carne para fijar línea genética
25 ene 2014 . Actualizado a las 07:00 h.El proyecto del cerdo «lalaino» avanza ya en todos los frentes. Las lluvias retrasan algo la obra adjudicada en noviembre, pero ya se va levantando en Mouriscade la sede futura que albergará la reproducción de las citadas líneas con una piara de cerdas. De momento ya se realizaron los primeros cruces con la cuatro razas, aunque fuera de ese espacio en obras. Precisamente, los lechones van creciendo y van ofreciendo datos del proceso de gestación y manejo y entran en fase de cebo y posterior sacrificio. En este punto se engancha ya el nuevo paso dado desde la Diputación, la contratación de los pertinentes estudios que la firma adjudicataria, en un mes aproximadamente (quince días para presentar proposiciones y quince para abrir plicas), pueda empezar a trabajar para ofrecer resultados como tope antes de que acabe el año. Se cierra así un círculo de acción que pasó de ser un idílico invento genético y el cerdo perfecto a algo racional y tangible: definir una línea de cruce con base celta con mejora de manejo y cría tradicional.
Las líneas genéticas porcinas que investiga la Diputación del Pontevedra a través del programa Depodeza cruzando cerdas celtas con machos de cuatro razas -Pietrain, Duroc, Landrace y Mangalica- y que popularizó el alcalde de Lalín, José Crespo, con o el futuro cerdo «lalaino», entra en una fase de resultados prácticos.
Deben conocerse, como muy tarde, antes de fin de año y ofrecer información sobre cualidades de la carne y capacidad para responder como producto de V Gama, modelo de plato que fabricado con elaboración y envasado riguroso gracias a las nuevas tecnologías convierte un precocinado en plato de primera gama que con un mínimo toque de horno apenas se distingue de un plato profesional del día.
El organismo provincial que dirige Rafael Louzán activó ayer vía boletín provincial este proceso, anunciando un contrato de servicio con plazo máximo de ejecución hasta el 31 de diciembre de este año y con una cuantía presupuestaria base de 193.600 euros.
El contrato que ofrece la Diputación quiere resultados prácticos de realización de análisis, estudios informes y experiencia piloto en V Gama sorbe la calidad de la carne obtenida en los distintos cruces realizados en el proyecto.
Esos datos resultan claves para poder definir una línea genética que se pueda trasladar a los productores de la comarca y regular los procesos de elaboración y manipulación de la materia prima destinada a obtener productos de calidad.
Los promotores del proyecto conceden gran importancia al capítulo de la variable de máxima calidad de la carnes y su transformación alimenticia. Entre los criterios de adjudicación priman, entre otros y sobre todo, el de propuesta económica, la mayor cantidad de productos V Gama ofertados.