Instan a la Xunta, a los alcaldes y partidos a exigir calidad y seguridad
11 jun 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Los representantes sindicales demandan la intervención y el apoyo de los alcaldes y los partidos políticos de la zona y les piden que salgan en defensa de la comarca de cara a evitar que la autopista pierda a quince trabajadores de los peajes que son sustituidos por máquinas. Una guerra en la que luchan unidos los afectados y sus representantes sindicales. Daniel Loureiro de UGT, Francisco Parga de la CIG y Germán López de Sita advierten de los «graves problemas de seguridade» que se darán con la supresión de la presencia humana. Explican que con ellos se pudieron en contacto diversos colectivos. se preguntan qué pasará si una persona sorda tiene alguna incidencia ya que se encontrará con la única posibilidad de pedir una solución a través de un teléfono, o a las personas con problemas de movilidad que no puede bajarse del coche y ponen como ejemplo el de una persona hace unos días y que tenía un problema de movilidad en un brazo.
La falta de personal originaría multitud de problemas. Señalan que no se pueden utilizar monedas de dos céntimos y de un céntimo y se preguntan si un usuario le daría por teléfono a un operador su número de tarjeta. Creen que aunque ahora son los peajes de A Bandeira, Silleda y Ribadulla los que se quedarán sin personal, el ERE «deixara a porta aberta á empresa a empresa a suprimir ós peaxistas de Lalín y Santiago» y creen que en unos meses «caerán os de Ponte, en Lalín».
Creen que esta es también una oportunidad para la zona para reclamar algún tipo de bonos, o rebaja en la autopista. Algo que vienen reclamando los usuarios. Consideran que la falta de posibles bonificaciones deja en desigualdad de condiciones a los vecinos de la zona respecto a otros de otras zonas y en cuyas autopistas si los hay.
Piden también ayuda a la Xunta y recuerdan que cuando la concesionaria de la autopista Vigo-Tui puso máquinas, la Xunta multó a la empresa y exigió que hubiera personal para mantener la calidad del servicio. La diferencia es que esa concesionaria dependía de la Xunta «e Acega de Fomento», dicen, y se preguntan si «nesta zona non precisamos un servizo de calidade». De momento ya mantuvieron una reunión en el Parlamento. señalan que solo fueron recibidos por el PSOE pero abogan que en este tema «non debe haber colores nin partidos e deberíamos loitar todos xuntos políticos, partidos, usuarios e traballadores».