En ovejas no somos potencia

P.V.

DEZA

La comarca da nivel en bovino y porcino pero en el censo de ovino el peso local es mínimo. Pontevedra es la provincia con menos reses de esta especie, salvo Tenerife

03 may 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

No somos potencia en ovejas. Lo dicen con claridad rotunda los censos ganaderos más actualizados, los que cifran las cabezas de ganado que había en todo España en diciembre de 2008. La escasez de este tipo de ganado ya sitúa sus cifras en niveles provinciales y aunque como en el resto de especies Deza y Tabeirós se lleve la palma del censo provincial las cifras dan para poco.

Mientras en la provincia pontevedresa en diciembre el Ministerio de Medio Rural censaba 105.768 cabezas totales de bovinos y 281.125 cerdos, mayoritariamente asentados en las comarcas de Deza y Tabeirós, con la cabaña de ovejas los números van por otro lado. En toda la provincia hay 40.750 unidades.

Es tan pequeña la cantidad de ovinos que no superamos a ninguna provincia de las que tienen algún ejemplar en el censo, salvo a Tenerife (30.270). Luego, solo a A Coruña con menos de un millar más admite comparación.

Hay tres provincias en España que destacan por el extremo opuesto. Badajoz censó 2,58 millones de ovejas; Cáceres, 1,51 millones y Ciudad Real con 1,13 millones. Luego, la relación va decreciendo a cientos de miles hasta las algo más de cuarenta mil pontevedresas.

Con mirada expansionista e idea de escalar en el ránking, la cabaña ovina pontevedresa además de mirar a A Coruña puede mirar también como cifras más próximas a la de Álava, Vizcaya, y Las palmas. Todas estas provincias no alcanza los cien mil ejemplares.

Si hay ordeño

Como los censos no son cien por cien fiables o se elevan de la anécdota de lo que pueden significar varios cientos de ovejas en una cabaña de casi veinte millones en todo España, también para Pontevedra y en concreto el Deza se da la anécdota de no registrar una realidad. El censo de ovejas en ordeño para Pontevedra y todo Galicia es de cero unidades. La realidad es que hay casi media docena de explotaciones que están trabajando y produciendo leche en sistema estabulado de ordeño como el vacuno. Es una excepción pero con nivel. Apenas hay ovino pero aún así hay ordeño profesional.