Esta semana, consensuará un protocolo con los clubes a las puertas del inicio de la Primera RFEF, con dos gallegos como locales
24 ago 2021 . Actualizado a las 20:18 h.Cuando apenas faltan unos días para el inicio de la competición en la Primera RFEF, en la que militan el Deportivo, el Celta B y el Racing de Ferrol, el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, fue interpelado acerca de la gestión del acceso y los aforos a los espectáculos deportivos dependientes directamente de los Gobiernos autonómicos (las Ligas profesionales se rigen por los dictados del Consejo Superior de Deportes).
El Racing será local en A Malata el sábado a las 17.30 horas contra el Unionistas de Salamanca y el Deportivo recibirá en Riazor al Celta B a las 21.30 horas del domingo. Los aficionados de ambos equipos están expectantes por conocer las condiciones de acceso a las gradas.
En las Ligas profesionales se ha establecido un 40% de aforo, acordado en el Consejo Interterritorial y con vigencia hasta el 29 de agosto. Al hilo de esta directriz, Julio García Comesaña explicó en conferencia de prensa que su intención es que «estos parámetros sean extensibles por comparación al resto de categorías, por lo que la línea de trabajo junto con la Dirección Xeral de Saúde Pública es acercar estos aforos a los valores de la Liga profesional».
En este sentido, a partir de este momento se sucederán las reuniones entre las autoridades y los clubes, pasando por la Consellería de Sanidade y la Dirección Xeral para O Deporte.
Pendientes de revisión
En todo caso, Julio García Comesaña insistió que «estos parámetros están pendientes de revisión y podrían cambiar en función de la situación epidemiológica, pero siempre partiendo de la idea de contar con cierta homogeneidad».
Asimismo, está por ver si se aplica la misma relación a otras competiciones no profesionales, pero de carácter nacional, como el balonmano, el fútbol sala, el baloncesto o el hockey sobre patines.
La temporada pasada, después de muchos vaivenes, en lo relativo a los clubes de fútbol de Segunda División B, terminó con las entidades deportivas planteando a la Xunta protocolos individualizados, bajo ciertos parámetros, que el Gobierno autonómico tendría que aprobar. Así, el Deportivo, por ejemplo, cerró el curso congregando a cinco mil aficionados en el estadio de Riazor. Y el Liceo contó en sus gradas en el Palacio de los Deportes con quinientos espectadores.