«El fútbol está sobrevalorado»

DEPORTES

ROI FERNÁNDEZ

31 ago 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Lo primero que llama la atención de Saleta Fernández (Monforte, 1997) es su estatura. Y después, su cercanía. A punto de terminar sus vacaciones, tomamos un agua en una cafetería de la calurosa ciudad del Cabe, pese a que la joven promesa del atletismo gallego no para de toser: «Me constipé en Portugal».

-¿Qué tal las vacaciones?

-Muy bien. Estuve en Monforte, luego en Berlín, volví a Monforte, fui a Portugal y ahora acabo de regresar. Me gustó mucho estar en Berlín porque pude ver el europeo.

-¿Y no participó?

-No, pedían 1,90 y mi marca personal es 1,86. Yo todavía soy sub 23. De todos modos, a la final pasaron con mi marca personal.

-Usted, dicen, es la esperanza en el salto de altura nacional.

-La gente suele decir: «Es la sucesora de Ruth Beitia», pero yo siempre digo que Ruth Beitia solo hay una. Y voy a hacer mi trabajo y a luchar para que las cosas salgan, pero no creo que tenga la calidad ni la cabeza de Ruth. Ella es muy fuerte psicológicamente.

-¿Le molesta que la comparen tan a menudo con ella?

-No, porque en el fondo es un halago. Sí que es cierto que me lo repiten mucho y yo siempre doy la misma respuesta.

Ed

-¿Dónde vive?

-Aquí y en Santander. Bueno, en Santander, aquí vengo un mes en verano y una semana en Navidad.

-En Monforte hay bastantes Saletas. ¿De dónde viene su nombre?

-Fue mi hermana la que se emperró en que me pusieran ese nombre porque pensaba que así saldría igual que una chica que la cuidaba en el colegio. Quería que fuera igual de guapa y de buena que ella y pensaba que, si me ponían su nombre, sucedería. La gente que conozco fuera de Galicia me dice que nunca escucharon este nombre.

-Usted se fue joven de casa. ¿Le resultó duro?

-Me fui con 16 años a Pontevedra e hice allí el bachillerato en el centro de tecnificación. Y a la hora de escoger universidad, elegí Santander. El primer cambio fue difícil porque pasé de entrenar tres horas a hacerlo todos los días. Y algunos días, doble.

-¿Qué es lo que más echa de menos?

-La familia y los amigos. Mis padres, mi hermana o mis primos vienen a veces a las competiciones, pero mis abuelas, no.

-Pensé que se iba a referir también a las empanadas de los domingos.

-Sí, sí. Pero la empanada no la puedo comer en temporada. Eso sí, en el mes que tengo libre en verano recupero eso rápidamente. Todo lo que no pude comer lo como en un mes. Sobre todo helados. Yo podría vivir comiendo solo helados, pizza y zumo de naranja.

-Le va a pasar lo que a David Cal.

-No, como máximo me pongo encima dos kilos.

-¿Cómo se ve dentro de 20 años?

-Pues con mi propia familia y trabajando en algo que me motive. Me gustaría seguir vinculada al atletismo, pero no como entrenadora.

-¿Se puede vivir del atletismo?

-Yo no. Puedes vivir si eres Ruth Beitia o si eres fondista y tienes cierto nivel, porque en las carreras populares y en las millas hay premios económicos. A día de hoy, los patrocinadores me han dado dos pares de zapatillas. El dinero que yo gano me da para pagar la carrera universitaria y ya. El piso, la manutención, los médicos... Eso me lo pagan mis padres. La Xunta no me da nada. La Diputación sí, algo. Si fuera de A Coruña, la Diputación me daría más; pero la de Lugo me da menos.

-Seguro que luego sí que vienen a hacerse la foto cuando consigue algún éxito.

-Felicitaciones tengo muchas, sí.

-¿Le entristece esa falta de apoyo?

-Más bien me desmotiva. Obviamente no hago esto por dinero, lo hago porque me gusta.

-¿Cómo era de pequeña?

-Muy inquieta. Me contaron que a veces, cuando mis padres se juntaban con amigos, mi madre decía: «Mientras yo hago la comida ocuparos de Saleta», y que le contestaban que preferían hacer ellos la comida, ja, ja.

-Defínase en pocas palabras.

-Soy muy exigente, trabajadora y cabezota. Me gusta recibir lo que doy.

-¿Celta o Dépor?

-El fútbol está sobrevalorado. Si tengo que elegir, elijo al Dépor.

-Con tanta exigencia y tan poco tiempo, ¿se puede tener una relación sentimental?

-Sí. Otra gente la tiene. Aunque es complicado. Yo no he tenido ninguna seria. Creo que es difícil: o tu pareja es de este mundillo o le tiene que gustar mucho y apoyarte.

-¿Qué aficiones tiene?

-Viajar, ver series y ver la NBA.

-Recomiende una serie.

-Blindspot.

-Una canción.

-Ya nada volverá a ser como antes, de El Canto del Loco.

-Lo más importante en la vida.

-La familia y la salud.