La selección vuelve a ilusionar

Alberto Bravo MADRID / DPA

DEPORTES

ERIC VIDAL | Reuters

El buen partido de Bruselas retrata un bloque con señas de identidad muy claras

03 sep 2016 . Actualizado a las 16:07 h.

Fueron solo 90 minutos de un amistoso, pero la victoria de España renovó las esperanzas de una hinchada que encontró motivos para creer en el nuevo seleccionador, Julen Lopetegui, y su proyecto. Cinco claves fueron reconocibles en el duelo contra Bélgica, donde el técnico esbozó la reconstrucción que pretende llevar a cabo para devolver a su selección a la senda ganadora.

Cambio

Un nuevo esquema. Durante los últimos seis años, Del Bosque había apostado por un esquema 4-3-3 con muy pequeñas variaciones. Lopetegui rompió esa tradición y propuso un 4-1-4-1, con Morata (luego Diego Costa) como único delantero y cuatro centrocampistas por detrás, dejando a Busquets como pivote. Este dibujo proporcionó un hábitat natural para jugadores como Silva, Koke o Vitolo, llamados a ser importantes en la nueva idea.

Filosofía

La apuesta por el estilo. En su primer partido, el seleccionador resolvió una duda que se presentaba crucial: España jugará con el estilo que le hizo campeona europea y mundial. El equipo volvió a agarrarse a la pelota como argumento distintivo y el primer gol ante Bélgica fue una clara prueba, pues marcó Silva después de una sucesión de pases y desmarques.

Centrocampistas

Presión voraz y coordinada. Lopetegui demostró que la presión adelantada será una de sus apuestas. Fue una máxima en los mejores tiempos de España, pero olvidada en los últimos años. O, como mínimo, mal practicada.

El seleccionador español aprovechó la superpoblación de centrocampistas para situar seis futbolistas en campo contrario y propiciar los robos rápidos de balón. Además, llevó su línea defensiva muy cerca de la raya divisoria del terreno.

Sensaciones

Ilusión y entusiasmo. Fueron dos palabras que utilizó el propio Lopetegui durante su presentación como nuevo seleccionador. Se lo pidió a sus futbolistas en un intento de olvidar las malas sensaciones de los últimos campeonatos, aspectos que tienen que ver con el ánimo y el optimismo con que jugaron los futbolistas españoles sobre el terreno de juego.

Jugadores

Implicación de veteranos y jóvenes. La estrella del partido fue Silva, un jugador de la vieja guardia que pareció asumir unos galones de líder de los que sí dispone en el Manchester City, pero que le cuesta asumir en la selección. Además, funcionó el triángulo de seguridad compuesto por Piqué, Sergio Ramos y Busquets. Junto a ellos, hubo futbolistas menos consolidados en la selección que dieron un paso el frente. Fueron los casos de Vitolo, ausente en la última Eurocopa, o Koke, quien durante estos años asumió un papel secundario en la selección que no acepta en su club, el Atlético de Madrid, donde es el referente. En cambio, España todavía necesita una mejor versión de Thiago Alcántara.