La organización de la mejor carrera de autocrós de España hace balance tras la prueba del Autonómico
20 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Ha sido testigo de primera mano de la explosión y decadencia del autocrós en Galicia, aunque los términos que utiliza no son tan definitivos. Javier Iglesias Ferrín (Arteixo, 1967) lleva 25 años como vocal de la directiva de la Peña Autocrós Arteixo, que viene de organizar la quinta carrera del Campeonato Gallego en Morás.
-Veinte ediciones del Nacional y setenta y cinco del Autonómico. ¿Qué balance hace de la última?
-El balance estará condicionado por la participación. Es una evidencia que existe un problema en ese sentido, especialmente en las categorías de más y menos de 1.600 cc, que ensombrece un poco la prueba, aunque hay que decir que en kartcrós y 4x4 ha sido muy buena. Participaciones de más de 31 pilotos no se dan en ninguna parte de España.
-¿Y la calidad?
-En 4x4, máxima, con dos campeones de España y ocho coches de alto nivel. Donde la cantidad falla, Arteixo sigue sosteniendo la calidad. No hay que olvidar a los Muíños, Vilariño, líderes de sus campeonatos...
-Han llegado a organizar tres pruebas del Gallego en un año. ¿Se plantean dejarlo solo en una?
-No. El planteamiento sería no organizarlo en absoluto. Arteixo tiene un nivel de exigencia que sería eso o nada. Pero de momento no cambiaremos.
-¿Y el Nacional?
-Está funcionando bien, aunque no al nivel de Arteixo de antes, porque manejábamos unas cifras que no estaban al alcance de nadie, con 140 pilotos y al límite de nuestra capacidad organizativa.
-La sensación es de decadencia.
-Es porque a nosotros siempre se nos exige lo máximo, que funcionen a la perfección servicios que ni siquiera hay en otros circuitos. Esas críticas parecen unidas a nuestro día a día.
-¿Se desmotivan?
-A veces molesta un poco, claro. Ya éramos la organización líder en el Gallego cuando cogimos el Nacional, y también fuimos progresando hasta ser punteros. Eso ya no nos lo puede negar nadie, aunque los tiempos cambien.
-¿El público responde?
-El de Arteixo es el más numeroso y el más entendido, aunque el clima nos condiciona mucho. Tiene un comportamiento ejemplar, en comparación con otros deportes como el fútbol y con otras disciplinas como los ralis. Está a lo que tiene que estar y trata muy bien a los pilotos. Me siento agradecido de formar parte de la disciplina del autocrós.
-¿Qué recuerdos se guarda?
-Pues se marcan más los peores, pero de los buenos, me quedo con el tercer Máster hace 22 años, que significó el salto de nivel. O en el 2009 con Sordo, Vallejo, Muñiz, Roma... fue muy especial y tocamos techo con 8.000 espectadores.
-¿Volverán esos tiempos?
-Se tienen que dar circunstancias especiales, como la disponibilidad de los pilotos. Aquella carrera no fue la mejor, pero sí la que tuvo más repercusión. En agosto, para el Nacional, esperamos una buena inscripción y si se puede relanzar la carrera otra vez con algún piloto, sería perfecto.
-¿Se han malacostumbrado?
-Recuerdo los primeros años con récords de 40 inscritos, pero se nos exige empujar siempre, no aflojar nunca. Ya nos parecía normal los 130 pilotos en el Gallego, con lo que demostramos que el autocrós puede ser un deporte de masas. Es bueno ser ambiciosos.
-¿Qué opina de la prueba del pasado sábado?
-Pues hubo carreras muy potentes. Tino Iglesias logró un doblete complicado, importante y muy peleado. Antón Muíños tiene ahora un nivel que le muestra como el más rápido de España con un kartcrós. Si hay que marcar una vuelta rápida en Arteixo, la hace. Es espectacular. La final de kartcrós fue intensa. Y en más y menos de 1.600 cc fueron de las que hacen afición. En 4x4, Calviño, Riveiro y Álvarez fueron al límite. Incluso el segundo grupo con Santi Ares, Sandra García y Mantiñán ofreció una pelea tremenda. Tampoco podemos decir que no haya buenas carreras, a pesar del bajón.