Un jugador del Narón acaba en el hospital al recibir «tres puñetazos»

Iván Antelo / Jose Valencia REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

El futbolista fue evacuado del campo en ambulancia a un centro hospitalario

26 sep 2015 . Actualizado a las 17:18 h.

Iván Seoane Bouza, jugador del Club Deportivo Narón, necesitó ser trasladado al hospital en una ambulancia del 061 tras ser agredido por un futbolista del Perlío en el transcurso de un partido de fútbol de la Segunda Autonómica, grupo A de Ferrolterra, que disputaban el Club Deportivo Narón y el Perlío en el campo de fútbol de O Cadaval.

El árbitro del partido, el colegiado ferrolano, Manuel Jesús Bejarano Estepa, describió la agresión, en el acta del encuentro, de la siguiente forma: «En el minuto 80, con el juego parado por un saque de esquina a favor del CD Narón, me avisan de que había una pelea en la banda más próxima a los vestuarios y contraria a banquillos. Veo cómo enfrente de los vestuarios (fuera del terreno de juego), el jugador recientemente expulsado del Perlío, el dorsal número ocho, Blake J. Taborda Arango, golpea con el puño en la cara hasta en tres ocasiones al jugador también recientemente expulsado del CD Narón, dorsal número 24, Iván Seoane Bouza, siendo separados por algún aficionado y directivos de CD Narón que estaban por la zona. En ese momento, la mayor parte de jugadores del Narón corren hacia esa banda incluidos algunos del Perlío increpándose mutuamente sin llegar a mayores, siendo separados por oficiales de ambos equipos que saltaron al campo para controlar la situación. Momentos después llega una ambulancia y traslada al jugador del CD Narón dorsal número 24 al hospital sin conocer los daños físicos sufridos. El partido pudo continuar sin más altercados».

Intervención policial

Añade en el acta que: «Al finalizar el encuentro acceden al vestuario dos miembros del CN de Policía pidiendo la identificación del jugador número ocho del Perlío. Asimismo me preguntaron ,si debían permanecer para asegurar mi integridad a lo que me negué puesto que no era necesario», escribió.

Juan Ramos, el presidente del Club Deportivo Narón, manifestó ayer que se llevó a «Peli» que es como coloquialmente conocen a Iván Seoane Bouza, al hospital debido a que se mareaba por los golpes recibidos en la cabeza: «No lo sé con total seguridad pero me han dicho que a las dos o tres de la madrugada ya le dieron el alta, después de realizarle varias pruebas».

El jugador no fue a entrenar en la jornada de ayer, tan solo se acercó a las instalaciones del Club Deportivo en O Cadaval para entregar el parte médico de la atención hospitalaria: «Tiene magulladuras por los golpes recibidos pero nada más, esperamos que en los próximos días ya se pueda incorporar a los entrenamientos», dijo.

La postura del Perlío

Por su parte, el presidente del Perlío, José Augusto Borreiro, indicó: «Está claro que es un hecho del que no te puedes sentir orgulloso, todo lo contrario. Uno de nuestros futbolistas ha perdido los papeles, aunque hubiera una provocación previa, y es algo que no podemos tolerar. Tenemos una reunión pendiente y en ella decidiremos las medidas a adoptar con este futbolista», explicó.

El juez suspende al agresor del Perlío con catorce partidos, la sanción más dura del curso

El Comité de Competición y Disciplina de la Federación Gallega de Fútbol (FGF) acordó sancionar al jugador del Centro Cultural, Recreativo e Deportivo de Perlío Blake Taborda Arango con catorce partidos de privación de licencia deportiva, la pena más alta en lo que va de temporada en el fútbol gallego.

La sanción tiene dos partes: «4 partidos de suspensión por agredir a otro, sin causar lesión, estando el juego detenido o a distancia tal que resulte imposible intervenir en un lance de aquel», expone el parte, en referencia a la jugada en la que el futbolista fue expulsado; y «10 partidos de suspensión por agredir a otro, tras haber finalizado el encuentro, y necesitando este atención médica», añade, aludiendo a la acción en la que derivó que el futbolista del Narón acabase en el hospital.

Las dos penas son acumulativas, ya que son fruto de dos acciones diferente, con lo que el jugador del Perlío estará 14 encuentros sin jugar.