El Náutico Boiro ganó al Melilla en un duelo que pudo llevarse cualquiera

DEPORTES

monica ferreiros

El partido, que llegó a un reñido quinto set, duró dos horas y media

19 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

El binomio entre equipo y afición sigue latente, tal y como se pudo ver ayer en el debut liguero en A Cachada contra el Melilla. Motivos no faltaron para que el público se dejase la piel con los jugadores del Náutico Boiro, que hicieron un gran desgaste físico en un partido con cinco sets, todos de larga duración, que los barbanzanos se llevaron tras dos horas y media de juego al lograr el 16-14 definitivo.

El primer acto fue para los locales por un ajustado 26-24. El Melilla comenzó el choque avasallando a su rival hasta situarse 4-10 en el electrónico. Los barbanzanos igualaron el resultado con el 11-11. El resto del set se caracterizó por el alto y parejo nivel de ambas formaciones, que firmaron tablas hasta el 24-24. Dos puntos decisivos de los boirenses sirvieron para anotarse el primer juego del duelo y de la temporada.

Hay que destacar el papel del debutante Gabriel del Carmen, un joven receptor de casi dos metros que llegó al Náutico avalado por su gran juego en categorías inferiores. Narciso e Iván también justificaron sus galones en el equipo. El segundo set también fue muy largo y físico. Ninguno de los dos rivales logró ventajas superiores a tres puntos, pero al final se lo llevó el Melilla, que estuvo más acertado en las últimas jugadas (23-25).

Tercer juego

El 22-25 que reflejaba el electrónico al finalizar el tercer parcial sirve para entender la igualdad de cada juego. Muchos de los puntos se decidieron en la red, y aquí, con casi todos los jugadores rondando los dos metros de altura, el Melilla se acabó imponiendo. El cuarto set lo ganó el Náutico, que forzó así el quinto para desempatar. El marcador, al finalizar el penúltimo acto, volvía a evidenciar el desgaste al que se sometieron todos los deportistas: 26-24.

El epílogo del encuentro fue más que emocionante. El público se volcó desde la grada con los locales para acompañarlos al triunfo final a base de animar en cada jugada como si fuese la última. La igualdad se repitió en el quinto set, ya que ninguno de los dos conjuntos logró una ventaja superior a dos puntos. Al final, el Náutico se impuso en una victoria que pudo llevarse cualquiera, pero que finalmente se quedó en A Cachada.