Un coruñés rumbo a Augusta

Paulo Alonso Lois
Paulo Alonso Lois REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

Parada, de naranja, supervisa el trabajo de Jonas Blixt.
Parada, de naranja, supervisa el trabajo de Jonas Blixt.

Jorge Parada, entrenador en auge en EE. UU. por su papel con jugadores de élite, arropará en el Masters a Jonas Blixt, número 49 del mundo

18 mar 2014 . Actualizado a las 18:20 h.

Jorge Parada encarna el sueño americano. Llegó a Estados Unidos para estudiar, luego se hizo profesional y encaminó su carrera hacia la enseñanza. Hoy, gracias al trabajo, la curiosidad y la formación continua se ha convertido en uno de los entrenadores de moda en el circuito norteamericano. El progreso de Jonas Blixt, número 49 del mundo, cuarto en el último Campeonato de la PGA, lleva su sello. La segunda semana de abril arropará al sueco en su estreno en el Masters de Augusta.

El prestigio de Parada le ha convertido en entrenador de otros profesionales de primer nivel, como la sueca Anna Nordqvist (decimoquinta del ránking femenino), el estadounidense Matt Every (97) y el sueco David Lingmerth (101), además de los australianos Scott Gardiner y Nick Flanagan. Establecido como responsable de la Tour Academy del TPC de Sawgrass, sede del circuito norteamericano en Ponte Vedra (Florida), el año pasado acompañó a sus jugadores en 15 torneos y planea ampliar esta temporada su compromiso a «entre 18 y 22». En cuatro palabras resume lo que supone para él vivir el mejor circuito del mundo desde dentro: «Un sueno hecho realidad».

Blixt prolonga la progresión que inició con Parada. «Las expectativas siempre son engañosas. De todas formas, Jonas ha ganado en el PGA tour dos veces en los últimos dos años, [el Frys.com Open y el Greenbrier Classic], y pasó del puesto 270 del ránking mundial cuando empezamos a trabajar a top 50. Nosotros trabajamos para ser los mejores y sin expectativas, pero creando confianza y dedicación. Teniendo el plan correcto, el resto llega solo», razona el entrenador coruñés desde Florida.

La temporada de Blixt ha sido tan completa que se ganó la invitación al Masters por tres vías diferentes: como cuarto clasificado del último PGA, como ganador del Greenbrier Classic y al haber terminado el 2013 como jugador número 42 del ránking mundial. Vigésimo sexto en el último Open Británico, Augusta enfrentará al sueco a un reto singular. Se trata de un campo donde la experiencia resulta decisiva para rendir bien.

«El Masters es muy complicado a no ser que tengas experiencia y un cadi con muchos años de trabajo en Augusta también. Tanto Jonas como Zach Williamson, su cadi, son debutantes en Augusta. Con el campo tan largo y favoreciendo una bola que vuela de derecha a izquierda -a Jonas le gusta pegar fade [el efecto contrario]- es complicado poner expectativas detalladas. Sin embargo su juego corto y su putt son normalmente muy buenos, así que tenemos muchas ganas de llegar y hacer el mejor papel posible. Este es un sueño hecho realidad para él», explica Parada, que ha ido encaminando su carrera hacia la élite de forma natural tras hacer prácticas en la academia de David Leadbetter, uno de los grandes gurús del golf. «Soy un privilegiado por trabajar con algunos jugadores tan buenos y tan dedicados».

¿Qué le deparará el futuro? «Me encantaría seguir en Estados Unidos, a corto plazo en Sawgrass, y a medio y largo plazo mis objetivos son continuar por el mismo camino, trabajar duro para llegar a cumplir esos objetivos», explica el profesional coruñés. «Siempre trabajo para llegar a lo más alto. Toda la gente tiene sus proyectos personales y la felicidad es lo más importante».

En Estados Unidos también ejerce de gallego. En el último Cadillac Championship en Doral, mostró en el campo de prácticas el funcionamiento del instrumento patentado por el profesional santiagués Ramón Bescansa para mejorar el juego en el green, The Perfect Putter.