Siempre luce el sol en Miami

Alberto Blanco

DEPORTES

29 oct 2013 . Actualizado a las 11:23 h.

Cuatro son las llaves de una temporada que arranca completa. Miami y Lebron James, los outsiders(San Antonio, Oklahoma), el estrellato de Marc Gasol y la ausencia de Kobe Bryant. En torno a estos parámetros se cifra toda la campaña. Un año muy importante para los seis españoles que tienen roles muy diferentes en la NBA. Los soles de Miami. El sempiterno bronceado de Pat Riley, boss en Miami, vuelve a poner al cuadro de James en el disparadero de todos los pronósticos. El brutal alero de Ohio, al borde de la treintena, quiere prolongar su reinado. King James tiene un equipo moldeado a su gusto y todo lo que no sea llegar a la final, sería un despropósito.

Repetitivos son los nombres de San Antonio u Oklahoma para destronar a los actuales campeones. Popovich, un hombre que da brillo al mercado europeo y pesca muy bien en nuestras aguas, trata de alargar la figura de Ginobilli hasta límites insospechados. Lo sancionarán nuevamente por sus descansos no enmascarados a sus figuras. San Antonio huele a finalista. Y con ellos, los Thunder de Oklahoma de Ibaka. El hispano-congoleño aspira a ser el mejor defensor de la Liga. Y en sus piernas y brazos anda ese título.

Marc Gasol. Nuestro faro en la NBA. Ha pasado a la carrera a su hermano, Pau, que sigue en Los Ángeles pero ya en otro camino. Ambos seguirán atrayendo focos. Y todos los GM de la NBA ven al mediano de la saga como un jugador top. No hay quién no lo quiera para su equipo. Estado de madurez total.

La mejora de Ricky Rubio se pudo comprobar este verano. Se juega su reputación. Su equipo tiene como objetivo los play off y de su chistera dependerá si los Minnesota llegan a esas cotas. Como Calderón, que aterriza en una franquicia todavía embriagada de su primer título mundial, los Dallas Mavs. El extremeño mantiene una reputación de alto standing en equipos de tono medio.

Y para cerrar dos nombres. Víctor Claver, papel testimonial en Portland y la Mamba Negra, Mr. Kobe Bryant al que se mirará con lupa hasta el día de su regreso. Parece mentira, pero más de una década después, el mejor escolta de la NBA sigue en el dique seco. Pero dará muchas noticias.