El Racing se reencuentra con un rival al que ganó con brillo en la liga 2001/02
24 oct 2013 . Actualizado a las 13:28 h.En solo dos veces en toda su historia, el Racing ganó en una misma liga tanto en Ferrol como en Santander a su homólogo cántabro, con el que se reencuentra el domingo. La última sucedió precisamente en su enfrentamiento más reciente, en una brillante temporada 2001/02 en la que terminó noveno. Dos partidos cargados de matices.
Solo pasaron doce años desde el último duelo en Ferrol. Pero algunos detalles remiten a otro tiempo: Estados Unidos iniciaba aquel 7 de octubre del 2001 su «guerra contra el terror» bombardeando Afganistán y solo el 14% de los gallegos tenía acceso a Internet. Y el equipo verde, en una tarde lluviosa, venció por 2-0 en A Malata, «El Racing gana al Santander y se sitúa a solo un punto de los puestos de ascenso», titulaba La Voz en portada. El equipo cántabro había descendido de Primera solo cuatro meses antes y mantenía parte de su plantilla.
Jugó aquel día el Racing con De Navas; Marcos, Burle, Íñigo, José Ángel (Romero, min 56); Manel (Redondo, min 70), Uriz, Lobos (Samir, min 70), Emery; Ismael y Nogueira. Estos últimos parecían Astérix y Obélix en punta, por la sutileza del navarro y la fuerza del ferrolano.
Astérix, Obélix y Burle
Nogueira avisó a los 27 minutos con un remate al poste. Y fue Manel el que aprovechó un tiro de Lobos rechazado por Ceballos para hacer el 1-0 a los 36. Terminó el primer tiempo y ni un tiro había hecho el Santander, en el que debutaba Quique Setién como entrenador en lugar del destituido Gustavo Benítez. En la segunda parte siguió el festival del Racing, que estampó un balón larguero tras un tiro con efecto de Lobos y reclamó un penalti sobre Ismael que demostraron las imágenes de la televisión. Ya en el minuto 80 llegó un cabezazo de Burle que mató el partido. El francés se redimió con una actuación redonda, pues en su debut en A Malata ante el Poli Ejido había sido un manojo de nervios.
Aquel triunfo dejó al Racing a solo dos puntos de los líderes, Oviedo y Burgos, y con un partido menos, pues debía disputar los 71 minutos pendientes de su visita a Tarragona, donde perdía por 2-0 cuando un apagón interrumpió el encuentro.
El Racing mantuvo las hechuras de equipo revelación, incorporó fichajes y se plantó en El Sardinero sin complejos. Jugó con Aizkorreta; Marcos, Burle (Íñigo, min 78), Jacob, Raúl López; Alberto Méndez (Redondo, min 58), Grozdic, Marsiglia, Delporte; Ismael y Diawara (Samir, min 70).
Tras un primer tiempo discreto, a los 55 segundos de la reanudación Grozdic regaló una joya. Arrancó en medio campo, se deshizo de cuatro rivales y remató ante Lemmens en una jugada que evocó al inolvidable gol de Maradona a Inglaterra en el Mundial de México 1986. La Voz recogió la comparación con el tanto del Barrilete Cósmico al día siguiente y tituló en una portada que invitaba al optimismo: «Un gol de Grozdic acerca al Racing al ascenso a Primera». El equipo verde se situaba décimo, pero a solo cinco puntos del Oviedo, ya en plazas de ascenso directo.
Aquella tarde Grozdic estampó otro balón en el palo de un cabezazo. Disfrutaron del triunfo y de la obra maestra del balcánico 500 racinguistas desplazados a Santander. El equipo cántabro, que ya apuntaba al ascenso, solo había perdido con el Extremadura en El Sardinero, lo que da idea del valor del triunfo del Racing.
Para encontrar la anterior victoria de los ferrolanos en el campo del Santander había que ir más de 40 años atrás, hasta la liga 1958-59.
El Racing quiere aclarar que los socios entran gratis el domingo sin necesidad de retirar entrada, solo con su carné. El único cambio en el partido ante el Santander radica en que pueden retirar invitaciones para sus amigos a precio reducido: 10 euros las de tribuna, ocho las de preferencia y cinco las del fondo sur. El plazo termina el sábado a las 13.00.
Luis César: «Fueron victorias de prestigio»
Luis César aunó éxitos y un sello propio en la liga 2001/2002. Su Racing atrevido y presionante desarmó al Santander, que no inquietó apenas en Ferrol y cayó 12 veces en la trampa del fuera de juego. «Fueron victorias de gran prestigio. Tras ganar en A Malata, viajamos allí sabiendo que podíamos derrotarles, y nos salió todo perfecto», recuerda.
Tras el gol de Grozdic, un periodista cántabro le preguntó por el perfil grueso del balcánico, y respondió: «¿Que no está en forma? Me gustaría que lo viese en paños menores. Es un auténtico culturista». «Era un saco de músculos, por un tema más genético que trabajado», recuerda. «Hubo un momento en que pensamos en poder irnos arriba. La segunda vuelta se nos hizo larga. No teníamos potencial para más. Pero fue un gran año», explica.
Íñigo: «Quizá teníamos equipo para más»
«Ganamos con dos partidos muy controlados, y eso que el Santander terminó ascendiendo, solo por detrás del Atlético», recuerda Íñigo Mardones, uno de los pocos jugadores que participó en aquellos dos encuentros ya históricos. «La plantilla se fue haciendo más fuerte a medida que avanzó la liga. Tenía mucha calidad en verano, pero luego llegaron Grozdic, Delporte, Diawara y otros. Visto con perspectiva, y aunque nunca renunciamos a nada, quizá teníamos equipo para terminar más arriba», apunta sobre una liga en la que el Racing acabó noveno, la mejor en décadas. «Pablo era el capitán, Aizkorreta, que hizo una liga tremenda, se encargaba de las películas en los viajes en bus, y manteníamos la costumbre de hacer la quiniela», apunta el vitoriano sobre aquel grupo, con cinco franceses.