El fútbol pasó de ser una diversión en los fines de semana a convertirse en un permanente problema de tensión emocional.
El fútbol conquista los pueblos de los países asiáticos con igual fuerza que sucedió en Europa tras la guerra europea, conocida también como la I Mundial. Ese fútbol, repetimos, tiene convulsionados a muchos seguidores de esa media docena de equipos españoles metidos en «el descenso más caliente», que tampoco fue el más duro puesto que en los primeros años de este milenio, el desenlace de la Liga 2001-02 fue muy complicado. Faltando dos jornadas eran 8 los equipos implicados en el descenso.
Y es que ya no queda nada nuevo bajo el sol, y menos todavía en los campos de fútbol en donde la euforia, prometiendo ganar, y el miedo por la derrota, parecen ir de la mano aunque de cara a la galería lo del temor se oculte al máximo para que no decaiga el entusiasmo de la afición.
El del descenso es un tema que viene acaparando la máxima atención por parte de los medios y, al revés de lo que sucedía en temporadas pasadas, no surgen en estos días pronósticos que arrojen objetivas esperanzas para este o aquel equipo. Todos, refiriéndonos a los 6 que están por debajo de la línea roja, llevan una cruz a cuestas. Las claves que se manejan dicen que el Granada se salvará sumando 2 puntos, cualesquiera que sean los resultados de resto de implicados. El Celta se quedaría sin opciones de salvación si pierde o empata uno de los dos partidos que debe disputar. El Deportivo depende de sí mismo para estar a salvo. Y para el resto, recomiendo echar mano de la calculadora porque tampoco estoy seguro de no haber incurrido en algún error en esta información.