Inquietan la lesión de Colotto, la expulsión de Zé y las molestias de Morel
29 feb 2012 . Actualizado a las 15:59 h.Peligro en Riazor. Tras la derrota de Sabadell la alineación deportivista se llena de incógnitas en defensa. A la lesión de Colotto, quien ayer apenas disputó medio entrenamiento junto a sus compañeros, se une la espera por que se quede sin sanción la roja que vio Zé Castro. Con la situación de los dos centrales titulares entre interrogantes, los problemas físicos de Morel, quien afronta a duras penas los ejercicios que ordena Oltra, añaden preocupación al once a solo 48 horas del partido (21.00 horas, Canal Plus Liga y GolT). El gris panorama se completa con la visita del Alcorcón, en la primera vuelta capaz de infligir al equipo coruñés un sonrojante 4-0 que se recuerda a menudo en el vestuario de Abegondo.
La primera duda, la de Colotto, comenzará a resolverse esta misma mañana. Está previsto que el argentino, con una sobrecarga en la pierna derecha, se pruebe y trate de aguantar de principio a fin el entrenamiento como baremo para entrar en la convocatoria de Oltra. Además, se conocerán las resoluciones de Competición. El Deportivo espera que Zé Castro regatee la sanción tras la polémica tarjeta roja que recibió en Sabadell.
Alternativas
Por si fallan, Aythami y Rochela esperan turno. El canario, titular hace tres jornadas contra el Recreativo, se perfila como la primera opción para su entrenador, pues entonces sustituyó al portugués. Este se había lesionado contra el Cartagena y fue baja en la siguiente jornada. En cambio, las posibilidades del canterano, que solo ha disputado catorce minutos de juego en Liga contra el Guadalajara, pasan por que ni Colotto ni Zé Castro sean de la partida. Y quizá ni así, pues hasta Borja, polivalente en el mediocentro y la defensa, podría adelantarle en las preferencias del técnico.
El caso de Morel responde a las ansias de competir de un futbolista con la musculatura muy castigada y que se pasó la semana pasada entre algodones debido a una lesión en la pierna izquierda. Agarrado a estiramientos al término de cada ejercicio y a largas sesiones de fisioterapia el paraguayo sostiene el ritmo de entrenamientos, mientras Ayoze, a quien arrebató la titularidad hace cinco jornadas, aguarda una nueva oportunidad.