Solo seis de los 21 rivales de Segunda han encajado más goles que los coruñeses
17 oct 2011 . Actualizado a las 17:26 h.«Donde más tenemos que mejorar es en no encajar tantos goles». Las palabras de Álex Bergantiños tras el empate del sábado frente al Nàstic reflejan uno de los lunares del Dépor. Únicamente seis de sus 21 rivales han encajado más goles y solo en un partido de los ocho disputados se ha quedado sin recoger el balón de su portería: el del debut contra el Recreativo y porque estaba San Aranzubia. Los coruñeses acumulan doce goles encajados, dos menos que a estas alturas de la temporada pasada en Primera, cuando su paupérrimo inicio alertó del fracaso final. En la temporada de su último ascenso, la 90-91, tras ocho jornadas apenas había encajado seis.
PÁJARAS
Altibajos de intensidad
Los minutos finales contra el Recreativo, la segunda parte al completo frente al Barça B o el pasado sábado ante el Nàstic y la comentadísima salida al campo en Alcorcón se convierten en los ejemplos más flagrantes del preocupante decaimiento del equipo durante sus partidos de esta temporada. Sin explicación aparente el Dépor se echa atrás, deja de presionar y dormita a la espera de alguna individualidad que no siempre aparece.
ESQUEMA
Sin plan en la zaga
Ni atacar con éxito, ni defender con criterio. Los hechos demuestran que la filosofía de Oltra todavía no ha calado entre sus futbolistas, que parecen haber asimilado las ideas de su técnico con alfileres. Anteayer reconocían sin rodeos que al Dépor le cuesta un mundo llevarse los puntos de los partidos. «Tenemos que hacer mucho para ganar, pero los rivales con muy poco nos hacen daño», se lamentaba Jesús Vázquez.
ERRORES
Problemas en las bandas
En la pizarra de Oltra, donde el Dépor juega muy abierto y en busca del rival, el extremo se sitúa muy al ataque y acaba por dimitir de sus responsabilidades defensivas. Así, el lateral se ve obligado a aguantar varios duelos en desventaja (dos contra uno) por partido. El sábado el lateral del Nàstic recorre en solitario 20 metros para llevar el balón a Tuni, que sirve a Powell para hacer el 1-1. Los mediocentros, con orden de mantener su posición en el centro, tampoco acuden en ayuda del lateral.
MEDIOCENTRO
Una autopista por el centro
El desgaste de los pivotes en el esquema de Oltra se torna brutal. Son los primeros en atacar para dar salida al balón y los primeros en defender, pues Valerón no colabora y Lassad apenas molesta al rival. Además, en la actual plantilla Álex Bergantiños y Jesús Vázquez apenas tienen relevo, juegan casi por decreto, pues de sus posibles suplentes o el técnico no se fía (Juan Domínguez o Juan Carlos) o continúa lesionado (Borja).
DEFENSA
Los centrales, en entredicho
Estos mismos problemas de bajas también afectan a la dupla de centrales, donde Colotto y Aythami carecen de rivales por una plaza en el once. Quizá por eso se afana tanto Oltra en hablar con ellos y trabajarlos psicológicamente un día sí y otro también. A la irregularidad de Zé Castro se suma ahora una sucesión de lesiones menores (gastroenteritis, calambres) que han apartado al portugués de los últimos partidos. Y, por ahora, la perla Rochela no cuenta más que para gozar de minutos en la Copa.
APORTACIÓN
A la espera de los fichajes
Solo el cedido Salomão convence. Y para eso gracias su ingente aportación ofensiva, donde nunca se cansa de encarar a su marcador en busca de la portería. Solo se le puede achacar algún exceso individualista. Hasta ahora, el resto, a la espera del debut de los lesionados Bruno Gama y Borja, suspenden.
DESENCANTO
Las dudas de Jesús Vázquez
El caso más extremo, por el rol al que estaba llamado en el equipo, es el de Jesús Vázquez. Combina sobre el campo un sinfín de gestos y órdenes con un fútbol al trote que no se le conocía en su trayectoria. Hace semanas que los goles del Alcorcón retrataron a la dupla de mediocentros, pero Álex Bergantiños marcó dos goles al siguiente partido. ¿Qué ha hecho su compañero hasta ahora?
PREPARACIÓN
Físico bajo sospecha
A la plaga de lesiones que asola al Dépor también en Segunda, se suman las dudas a su estado físico general. Dos datos: frente al Nàstic marcó su segundo tanto en Liga tras el descanso. Además, en cuanto a los goles en contra, en este período final ha encajado siete de los doce que recibió.